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Los trovadores de la región narran la historia de sus héroes. (Historias escritas por los jugadores)

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Pereza
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Mensaje por Pereza »

Al despertarme aquel día, pensaba que todo había sido una pesadilla, que todo lo que había hecho no había ocurrido y seguía en el orfanato pero no era verdad. Estaba en una habitación que no reconocía, bastante acogedora con varias plantas y mejunje intuyo que usados para curarme. No tardó mucho en entrar un señor mayor.

-"Vaya, veo que te has despertado chico. Es un milagro dado a tu estado".

Tenía razón, al mirar mi cuerpo, estaba destrozado por culpa de los experimentos de los Magos Rojos. Mi brazo izquierdo estaba completamente vendado y sentía un dolor bastante insoportable. Aunque al ver el brazo, lo que de verdad me dolió fueron los recuerdos que vinieron.

-"¿Chico? Te ha cambiado la cara de golpe. Deberías estar alegre, has sobrevivido a esa explosión y suerte de ti que me encontrase buscando plantas medicinales y te encontrase"
No podía evitar de mirar mi brazo y llorar por todo lo ocurrido en aquel día. Yo... les había matado. No se como pude sacar la fuerza para decir:

-"Yo he causado esa explosión..."

El hombre, sin cambiar un ápice el rostro me contestó:

-"Se lo que has pasado allí dentro. Entre los escombros y ceniza pude rescatarte a ti y un diario que no he podido evitar echarle un ojo"

Acto seguido me mostró un diario con el número 4 en la portada.

-"Tengo que decirte que... lamentablemente parece que no tienes sensibilidad en las piernas ni en parte del torso. Es un milagro que puedas mover algo las manos después de todas las atrocidades que contaba ese diario. Por cierto, si quieres quedártelo deberías tachar un par de cosas... por si cae en malas manos"
Y sin más, se marchó de la habitación, dejándome solo con el diario en mi regazo. Y así, entre lágrimas abrí el diario.


*Un diario muy quemado que tiene un relieve de un número 4 en la tapa*
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*La tapa del diario parece que ha parado el fuego en las primeras páginas y son legibles*
*Primera página algo quemada por las esquinas y por la parte de abajo*
Tercera me ha hecho empezar a escribir un diario para relajarme. Dice que si no puedes contar cosas a la gente al final estallas en una bola de nervios y te salen arrugas en la cara... sigue sin tener humor aunque ella cree que si. Como no vemos a nadie excepto a los de las túnicas rojas, supongo que lo voy a contar por aquí, en el regalo que me hicieron Primero y Segunda. Un diario y una pluma con tinta que no se de donde lo han sacado... Puede que lo robaran de los rojos, a saber....
En cuanto a mi, no recuerdo nada de antes de llegar a este sótano inmundo, pero antes que yo llegó Primero, le llamamos así por Tercera dado que nos marcaron el cuello con números al ir llegando en este lugar.
Primero es amable y Tercera no para de decirme que apunte que es guapo, así que tu ganas escrito. Es el que lleva más tiempo aquí, tiene el cuerpo magullado y con cortes, como todos al fin y al cabo... Me ha contado que con el están experimentando *Zona tachada a consciencia e imposible de leer*. Él nos recibió a todos, uno por uno en orden de llegada y nos hablaba de lo que creían que estaban haciendo aquí. Por cierto, él tampoco se acuerda de nada antes de llegar a este sótano…
Luego viene Segundo, el más mayor de todos. Es bastante más alto que nosotros, lo que impacta más cuando le ves llorar por las noches. A veces me despierta porque dormimos en el mismo suelo de la misma habitación... Él en cambio, aunque no se acuerda de nada de su pasado, no para hablar de la pesca. Piensa que su familia podría ser pescadora o algo por el estilo... Con el hacen pruebas diferentes que con las de Primero, a él le *Zona tachada a consciencia e imposible de leer*.
Pasamos a hablar de Tercera, la elfa pelirroja más hermosa de que nunca he visto... Primero, Segundo y yo nos quedamos embobados cuando se nos pone hablar. Tiene un humor algo peculiar y es la culpable de que tengamos nombres dado que los de rojo nunca nos han puesto ninguno ni dicho nuestro antiguo. Con ella las pruebas consisten en *De nuevo una zona tachada, esta se ve tachada con fuerza y repasada con rabia*
Así que aquí empieza mi día a día en mi grandiosa vida. La vida de Cuarto.


*Siguiente página*
Día 1
Como no se el día en el que estamos pongamos que hoy es el primero día, aunque llevo muchos más aquí. Como todas las mañanas, Primero se la levantado como un resorte del suelo y antes que llegaran los rojos nos ha levantado. El tipo es majo, algo rarito, pero no le culpo... lleva mucho tiempo aquí, eso debe trastocarte.
Después cada uno se ha metido en respectivamente en su sala a hacer la rutina... hoy conmigo han *Zona tachada e ilegible*. Después de eso nos hemos reunido de nuevo en nuestro cuartucho/sótano y nos han dado algo de comer. Poco más puedo sacar de este día excepto por que Tercera se ha comprometido a enseñarnos élfico. Puede ser interesante...


*Siguiente página del diario*
Día 2
Misma rutina de siempre... Aunque esta vez me he levantado yo antes que nadie y les he despertado. Es un trato que tenemos entre nosotros, preferimos despertarnos entre nosotros a que nos despierten a patadas.
Hoy Segundo ha estado especialmente triste, piensa que vamos a morir aquí pero Primero le ha cambiado de tema rápido a la pesca y se ha alegrado. Yo me he metido por medio con ellos y al final hemos acabado los cuatro hablando del mar azul. De hecho, delante de Segundo y Tercera, yo y Primero les hemos jurado que les sacaríamos de aquí y les llevaríamos a pescar por todos los mares del mundo entero. Aunque a Tercera eso no le importa, ella no consigue sacarse de la cabeza un lugar llamado Nevesmortas. Así que yo le he dicho que la llevaría también. Ella me ha respondido que no era su tipo mientras se reía, que forma de romperme el corazón... luego me ha dado unas palmaditas en la espalda mientras me decía que era broma. Creo que esta jugando conmigo. Primero y Segundo se han reído del espectáculo hasta que han golpeado la puerta gritando que nos callásemos ya de una vez. En realidad nos lo han dicho con varios insultos de por medio.

*Las siguientes páginas están quemadas y no se puede sacar texto que leer hasta el día 14, el diario parece en bastante mal estado*
Día 14
Hoy hemos acabado antes Tercera y yo de nuestra rutina con los rojos así que nos hemos quedado a hablar esperándoles. Al rato ha venido Segundo llorando. Se ve que le han hecho bastante daño. Hemos temido por Primero que no ha vuelto hasta la noche. Simplemente, al llegar, ha levantado el pulgar medio sonriendo y se ha dejado caer a su rincón. Empiezo a preocuparme por esta situación... Tercera y yo nos hemos mirado ante tal situación y nos hemos asustado. Aunque le hemos dejado descansar sin más.
Para despejarnos hemos seguido con el élfico. Según tercera para pronunciar bien la legua tienes que sonar como si te hubieras atragantado con algo. Esa broma aunque era mala me ha hecho alejarme de toda esta situación de mierda. Poco después me he ido a dormir.

Día 15
El día de hoy has sid
*Toda la siguiente página esta completamente quemada y no se puede leer hasta el día 38*

Día 38
Hoy se ha levantado Tercera antes y nos ha despertado liando su manta y golpeándonos con ella... que susto nos hemos llevado. A veces es un poco rara, pero ella se ha reído muchísimo al vernos despertar. Por lo menos alguien se lo pasa bien...
Tras la rutina de siempre, hoy se les ha olvidado darnos de comer... o eso creemos pensar. Así que hemos hablado de tabernas, de la comida que brindan y la bebida... Creo que podría vivir en una toda mi vida, aunque no creo ni que llegue a pisar una. Primero se ha levantado y dicho que abriríamos una, entre los cuatro y la llamaríamos "El reposo de los Cuatro". He sonreído leve aunque en su mirada he visto que solo son palabrerías. Él sabe como yo que no vamos a salir de aquí.
Luego hemos empezado a hablar de nuevo sobre que pensábamos que estaban haciendo aquí con nosotros. Hemos llegado a la conclusión de que *Zona tachada*. O eso creemos.
Voy a dejar de escribir por hoy... estoy demasiado hambriento y cansado.

*De nuevo, todas las demás hojas están quemadas completamente hasta la página 49*
Día 49
Primero cada día llega más tarde a la habitación así que hemos hablado con él. No ha querido hablar hasta que le hemos sonsacado la verdad. Ha hecho un trato con los rojos... esta haciendo sus pruebas y parte de las nuestras para sacarnos de aquí. Le he sonsacado la información a tortazos porque me preocupa. Cada vez se le ve más débil, no tenía fuerzas ni para mantenerse en pie.
No hemos podido hacerle cambiar de opinión, aunque le están engañando y él lo sabe, ojalá pudiera cargármelos a todos... que rabia les tengo...

*Todas las siguientes páginas siguen quemadas hasta las tres últimas del diario*
Día 65
Hoy se están centrando de nuevo con Primero y no se que podemos hacer al respecto. No se que clase de pruebas le están haciendo pero tiene el cuerpo lleno de runas y cortes. Eso no se parece en nada a lo que nos han hecho individualmente a cada uno de nosotros. Lo más jodido de todo es que lo han dejado paralítico. Lo traen cargando como un saco de patatas, parece que mientras pueda mover los dedos a ellos le sirve. Aún así siguen experimentando con él haciéndole *Zona tachada e ilegible* . Lo van a acabar matando, hay que hacer algo al respecto...
Cuando ha llegado de las pruebas, hemos hablado con él para hacer un plan para escapar pero para eso tiene que poder moverse por su cuenta así que hemos empezado a practicar con él y la dichosa urdimbre que nos es innata para ver si con ella puede moverse aunque sea un poco.

Día 102
Hoy han empezado a torturarnos de nuevo a todos. Parece que Primero no esta dando los resultados esperados. El lado bueno es que parece que hemos avanzado respecto al tema de que pueda moverse. Lo consigue usando la urdimbre, una palabra que escuchamos mucho, por desgracia. No parece un movimiento muy.... normal, de hecho Segunda dice que ha leído sobre "Constructos" y describen su movimiento igual que el que hace él. Según ella son como seres de metal algo lentos, o eso dice... a saber si se lo esta inventando. Pero quitando que se mueva de forma extraña, lenta y poco precisa es un gran paso, de aquí poco, cuando lo domine más intentaremos escaparnos. Como? Eso es algo que tenemos que averiguar aún, pero no podemos seguir en este estado o acabaremos muertos... Se acabó lo de rendirse, saldremos de aquí.
*Final del diario*


Al día siguiente, tras haber tachado varias cosas del diario, apareció de nuevo el señor mayor y se sentó en una silla delante de la cama mirándome y me habló, esta vez sin dar rodeos.

-"Muchacho... Eres el que en el diario llaman Primero ¿verdad? La marca con el 1 en tu cuello es bastante llamativa. Por tu mirada imagino que si.... *Suspiró y volvió a hablarme* No tienes que culparte. Si tu causaste la explosión no querías hacerles daño a tus compañeros. Se puede ver a simple vista leyendo el diario de tu compañero. Seguro que aún haberte dicho esto sigues culpándote por ello, pero, no se han ido del todo si sigues recordándolos. "

En ese instante recordé a Segundo y su fijación con el mar y la pesca, a Segunda y su villa, a Cuarto y sus ganas de tener una posada. De ahí saqué las fuerzas para encender mi mano derecha gracias a la urdimbre y, aguantando el dolor, cambiar el 1 de mi cuello por un 4. Seguidamente, con una mirada fría, apagada y una sonrisa acompañada le pregunté:

"¿Por donde queda Nevesmortas?"
Pereza
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Re: 4

Mensaje por Pereza »

Diario con un 1 en la portada.

No se porqué hago esto, tal vez quiera hablar de esto con alguien y nadie sea la adecuada. Lo único que sé es que si no escribo ni hablo de esto con nadie no va a ser bueno... Así que aquí van mis desventuras.
(Si alguien lee esto, no tienes permiso, déjalo. Por otra parte perdona, soy nuevo en esto de escribir diarios. A cuarto se le daría mejor...)


Primera entrada del diario: El Basilisco
Es casi imposible dormir. Cada vez que cierro los ojos no paro de ver la misma escena.
Pensaba que con la jugada que me hizo el Basilisco estaría mejor, fue cruel volver a repetir la escena con los rostros de mis amigos, mis hermanos...
Pero no era más que los juegos de ese asesino por intentar destruirme poco a poco. Tal vez se pensaba que no podría matarlos de nuevo y por hacerlo me recompensó enseñándome la verdadera cara de cada uno. La cara de los que nos habían hecho tanto daño tiempo atrás.
Pensaba que dormiría mejor pero no puedo, siempre la misma escena. Todo es engullido en llamas y no puedo hacer nada para evitarlo.
Creo que lo mejor para evitar que vuelva a pasar es limitarme, como siempre he hecho.



Segunda entrada del diario: Urdimbre
Hoy todo ha estallado, un gran estruendo y de golpe esa sensación extraña, como que algo no esta bien.
Aunque la mayoría de mis heridas habían sanado y había jurado no usar la urdimbre, no hacerlo me ha perjudicado a mi y a todos los arcanos... Tal vez podía haber marcado la diferencia, tal vez podía haber sido mejor...
A veces pienso que debería usarla y actuar más, pero siempre que la uso me acechan los fantasmas del pasado. No estoy seguro de que hacer. Lo único que sé es que estoy jodido, y que Zalcor no tiene manos.



Tercera entrada del diario: Orcos
Rompiendo la promesa me he adentrado para ayudar a una amiga con un problema con un orco. Debí haberme informado mejor... En un pestañear todos mis compañeros estaban en el suelo, desangrándose y yo, por no comprender mejor mi don soy incapaz de hacer nada.
Veo como los hilos de urdimbre se deshacen al acercarse a ese orco con el parche y de nuevo veo como todo se vuelve en llamas, todo arde y yo no puedo hacer nada.

- Buenas sean Orco del parche *Cuarto hace una reverencia con la mano* Esta claro que yo solo no puedo contra ti y... sería un desperdicio que yo matase a los que te acompañan y tu acabases con mi vida. Te propongo algo mejor...

El orco no dudó en sellar el pacto y marcar en mi pecho otra marca más, por si no fueran pocas las que acarreaba del pasado.
Podía ver como las llamas que abrasaban todo en mi cabeza se apagaban esta vez sin muertes de mi nuevos compañeros. Y haría lo que fuera para no ver esas llamas engullir todo de nuevo, incluso conjurar contra mi propia amiga.



Cuarta entrada del diario: El Mago raro
He intentado quitarme la marca que me dejó el maldito orco con el parche y, para sorpresa de nadie no ha salido bien.
Tres días tumbado en ese suelo de madera de la casa que había conseguido por mi mismo... tres días de asedio a Sundabar.
Pude verlo, como en las pesadillas que suelo tener. Pude ver como los orcos asediaban todo Sundabar y todo me llevaba a el sótano de una casa, con un tipo encapuchado que me prometía poder. Ese poder para borrar ese dichoso sueño repetitivo, el poder de no ver como todo arde sin poder hacer nada.
Estaba entra la espada y la pared, que podía hacer sino aceptar. Y bajo el nombre de Cuervo me inyectó ese líquido lila mientras asentía y me llamaba Cuervo.



Quinta y última entrada del diario: La mansión
Cada día es todo más raro, ya no se quien soy... Debería usar mi don? Esta claro que se me da bien usar la urdimbre... Eso significa que puedo usarla? Quien era el tipo encapuchado? Los orcos seguían en Sundabar y yo me veía abrumado. Así que que mejor que encerrarme en mi mansión, encontrando la paz que siempre había buscado.
Que engañado estaba. Los días pasaban sin saber nada de lo que pasaba fuera y que más da? No es mi problema. Mientras cogía cerveza tras cerveza. Meses que parecían años con la sola compañía de mis pensamientos. Nada bueno me esperaba fuera.
Mis amigos contra mi por lo que hice con el orco... poco más me ataba a salir ahí afuera. Pero es que es tan aburrido estar aquí dentro.
Tras varios meses pude ver a alguien demacrado frente al espejo, con barba y pelo largo y esa mirada apagada.
No aguantaba más, no podía quedarme más en ese sitio con mi tan ansiada paz, lo que de verdad quería era el caos, el peligro, eso que me había dedicado a apartar todo este tiempo. Así que por eso y por que se había acabado la cerveza decidí salir a ver si todo había estallado o seguía como antes, no sin antes afeitarme y y cortarme el pelo, esta vez sin coleta. Debía dejar los fantasmas del pasado atrás...
Volvía a parecer alguien decente para volver a las andadas. Así que tomé el pomo de la puerta y salí a ver de nuevo el mundo, Neves...
Allí pude ver a un nuevo grupo de aventureros que me tomaron por un borracho cualquiera. Y no les culpo, aún estaba algo borracho mientras les seguía hacia una aventura nueva.
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