Buppi Salta Charcos

Los trovadores de la región narran la historia de sus héroes. (Historias escritas por los jugadores)

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Daro
Tejón Convocado
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Registrado: Jue Sep 08, 2022 4:07 am

Buppi Salta Charcos

Mensaje por Daro »

Hola!! * Saluda animadamente *

Bienvenidos a la posada en la noche de las historias, hoy me toca contar la mía como manda Brandobaris.

Mi nombre es Buppi * leve cabeceo a la audiencia* de los Salta Charcos de Amn. Somos una familia de comerciantes y relojeros afincados en Amn, mi familia tiene un taller en Crimmor donde arreglamos casi de todo con engranajes, relojes, cajas de música, maquinaria especial.. Mi tía vive a medio camino de la capital Athakatla y estuve viviendo un tiempo con ella y con mi primo Perin. Conocía muchos aventureros y algunos héroes condecorados durante esos años, al cumplir los 20 mi primo decidió que quería ser uno de ellos y tomó rumbo al norte, escribía cada dekhana contando grandes aventuras muchas cosas increíbles que estaba viendo, mi tía, como buena seguidora de Yondala, no aprobó esa decisión, "siempre se está mejor en el hogar" decía cuando salía el tema. La cosa es que Perin acabó tomando senda encomendándose a Brandobaris y sinceramente... tenía cierta envidia de su valor, yo siempre había escuchado las historias de quienes venían a comprar a mi tía y soñaba en secreto con contar mis propias historias cuando llegase a casa.

Pasados un par de años dejaron de llegar cartas de Perin y mi tía, como no, se preocupó mucho por él. Entonces vi mi oportunidad y le dije que iría a buscarlo, que tenia las cartas como guía de las rutas que había tomado para poder seguir su pista. Tomé lo que pude y me pudo dar mi tía para el camino (Dioses, como echo de menos sus empanadas) y me dirigí al norte. Recorrí muchos caminos y reinos, dormí en posadas y más e una vez a la intemperie, conocí gente interesante en las calles de las grandes ciudades y gente que preferiría no haber conocido pero que también me enseñaron lecciones valiosas. Hablé con Enanos, Gnomos y Elfos de todo tipo.. menos unos que decían que no salían de los bosque y que algunos mercaderes me dijeron que era mejor evitar. Trabajé unos meses como acróbata en una caravana circense, grandes personas cuando llegas a ser uno de ellos (por suerte siempre he hecho el mono, como decía mi madre). También estuve un tiempo reparando objetos con un viejo buhonero que tenía más años que un árbol y me contó cosas increíbles del norte y le enseñé las últimas cartas de Perin que hablaban de una ciudad costera, Argluna, la capital de la marca me explicó el viejo Vintas. Me dejó en una pequeña villa al sur de la marca, de aquello ha pasado casi un año y he recorrido cada rincon que he podido de estas tierras buscando a Perin, no sé si tomaría un barco en la capital con algún destino aún más lejano y por eso ya no llegaban las cartas, solo Brandobaris sabrá.

Ahora vivo mis propias aventuras, atesorando las historias con la gente que he conocido en el norte, hay cosas asombrosas, he visto dragones, no muertos, hombres lobo y jabalí, magos poderosos y oscruros, orcos enormes y gigantes.

¿Qué más me depara Brandobaris en adelante? No tengo ni idea, ¡pero estoy deseando vivirlo!



Al terminar el relato sus ojos brillan más aún que al comenzarlo, está claro que este mediano no está hecho para quedarse en casa, al menos no por el momento.
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