Rumores de taberna "esa es la lela"

[Nela]

Entre el ruido de las jarras, gritos y demás bullicio de la taberna, algunos jóvenes forasteros se reúnen tras el cansado viaje hasta Nevesmortas. Todos celebran, jarra en alto, el exitoso viaje lleno de peligros que han recorrido hasta llegar. Entre ellos, uno desvía la mirada a una muchacha que entra y sale tapándose los oídos.

Con cierta curiosidad, el muchacho se asoma fuera de la taberna y ve a la muchacha de mirada inocente y despistada, con cierto toque de ausencia, juguetear como una cría y andar sin rumbo, sin pronunciar palabra a quienes parecen hablar con ella. Extrañado, preguntó a uno de los habitantes locales quien era esa chica "es la lela" respondió burlón "Nela la lela" repitió en burla a la muchacha.

El joven volvió a la taberna, algo molesto por la mofa hacia la muchacha. ¿Como es posible que una mujer con ese aspecto inocente fuera objetivo de esas burlas? Decidido, se acerco al posadero para preguntar por ella, pues todo el mundo sabe, que los posaderos saben todo lo que acontece en las cercanías.

"es una trágica historia" dijo el posadero mientras secaba una jarra con un trapo. "Esa muchacha era buena cliente, siempre dejaba propina aunque no tuviera mucho dinero” mustió pensando en el dinero extra que sacaba gracias a la muchacha y guardo la jarra tomando otra y continuando con la limpieza. “Según dicen los rumores, hubo una trifurca en las puertas del norte, la muchacha, que intento detener la pelea, cayó y se dio un golpe con el filo de una enorme roca abriéndose la cabeza. Muchos la han tratado, clérigos… arcanos… pero no han sabido devolverle la lucidez que antes tenia. Yo al menos, no creo que se recupere nunca, ¿pero que sabre yo? Si solo soy un posadero”

El muchacho se encogió de hombros y volvió fuera para mirar a la muchacha. Estaba sentada en la fuente con un gato en su regazo que disfrutaba de sus caricias, con ese aspecto feliz que le otorgaba una extraña belleza, pero que la marca del golpe en su cabeza afeaba un poco. Pero poco fue el interés que despertó en el muchacho cuando sus compañeros de viaje le volvieron a meter ofreciéndole mas bebida... al fin y al cabo, solo era una desconocida.