Avanzó con resolución unos pasos internandose en el circulo de troncos alrededor de una hoguera aun humeante. Tras la bufanda, todavia podia percibirse el hedor de sangre, sudor, humo y quien sabe más.
Rebuscó en un zurrón y comenzó a vaciar con precisión el contenido de un vial tras otro, y otro, y otro...
Media hora más tarde la figura se paró nuevamente en la entrada y extrajó un arrugado rollo de papiro. Lo leyó en alto y el paprio se consumió dejando en las manos de la figura una densa nube rojiza. Con un gesto la impulsó hacia la hoguera.
El gas se expandió y las llamas brotaron de la madera, de la piedra, del hueso y de la carne. El fuego calcinaba y consumia... y los ojos rojizos observaron, hasta que el humo acumulado resultó excesivo.
Tras la bufanda el humo comenzaba a filtrarse con facilidad, asi que nuevamente una mano se extendió hacia el fuego. Una bola negra comenzó a crecer en medio de las llamas y se derramó sobre la zona como un vial de tinta negra como la pez.

En el exterior, el humo y el fuego.
Dos pequeñas hachas aparecieron en las manos de la figura y con cierta pericia a los pocos minutos un cartel confeccionado por madera de roble, se colocó al lado de la entrada de la humeante cueva.
Habiles manos golpearon la plancha de madera una y otra vez mientras el mensaje iba quedando grabado en diversas lenguas con una pulcra caligrafia.

Un cartel en varios idiomas...
Puede leerse la siguiente inscripción en c omún, elfico, enano y orco.
"Si alguien me molesta nuevamente, reparare la cueva con sus huesos"

Un par de gruñidos y siseos se escucharon minutos despues. Luego... el silencio de las llamas en las sombras.
// Las screens son más bien malas, pero he tenid oque tirar de paint hoy... el Corel se negaba a abrirse.