
Vivencias VI
_ _ _ Tras un largo viaje, decidí descansar, cada cual por su lado. Extendí la esterilla, me dispuse a rezar, descalza, de rodillas, con los ojos cerrados. Al abrirlos, vi brillar, algo, me acerqué a ver lo que era, una especie de gema, la más brillante que haya podido ver. Mi tentación me pudo. La recogí y al examinarla, sentí que me absorbía, sentía volar en sueños, giraba y giraba hasta que desperté.
_ _ _ Estaba en una sala circular, con una ligera capa de agua, que empapó mi ropa. También vi agua en las paredes, como si hubiera sido vaciada hace poco y en el centro, una palanca. Fue cuando mi estómago reclamó protagonismo, y vomité. Vi también a Jean, Sefiya y a Zalcor a mi lado. Hablamos, pero, nadie decía saber nada, salvo el momento anterior, cuando la gema. Era mágica, ¡brujería!. Me sentí tonta al caer en tan burdo truco arcano. Intentaría que no volviera a ocurrir. ¡Odio estar encerrada!.
_ _ _ Una voz surgió de ninguna parte, resonaba por toda la estancia. Algo de un experimento de número 638 y 003. Alguien comentó que éramos el tercer experimento, creo que fue Sefiya.
_ _ _ Era una especie de prueba, en otro lugar, al parecer, había otro grupo. Surgió otra voz. Nos ofrecieron entrar en su juego.
Si tirábamos de la palanca los dos grupos, recibiríamos una descarga casi mortal.
Si uno tiraba y el otro no, este, recibiría una descarga mayor que el que tiraba.
Si ninguno tiraba de la palanca, los dos recibiríamos descargas menores.
- Yo intenté encontrar el sentido de la prueba, se lo comenté a mis compañeros.
- Sefiya seguía buscando como salir.
- Jean se centró en encontrar a nuestros captores, y como cegarlos.
- Zalcor… Zalcor no pensaba hacer nada, con la excusa de no querer hacer daño a nadie. Pero igualmente íbamos a recibir una descarga, según las voces. Eso sí, hizo varias promesas. Que nos salvaría… que nos sacaría de aquí.

_ _ _ Una de las voces, avisó de que el tiempo se acababa, no tocamos la palanca. Informó que nadie más tocó nada. Recibimos una descarga… que me hizo castañear los dientes. Las pócimas no funcionaban. Las vendas eran inútiles contra esos rayos. Otra similar, y yo no sobreviviría… ¿cómo sería la casi mortal?.
_ _ _ Volvió a discurrir el tiempo. Jean vio una zona oscura en el techo, pensaba que podríamos cegarles, pero nuestros esfuerzos fueron en vano. Nadie volvió a tirar de la palanca. Volvió la descarga. Todo mi cuerpo comenzó a sentir espasmos, un dolor indescriptible, caí inconsciente.
_ _ _ Cuando recuperé la consciencia, sentí que alguien me había puesto un anillo. Parecía drenar fuerza hacia mí. Miré a los lados. Pregunté de quien era. Hasta que recibimos una tercera descarga, esta vez, quizás por el anillo, no fue tan intenso todo. La dueña del anillo era Sefiya, se lo devolví para que pudiera curarse. Zalcor estaba totalmente inconsciente, le dejamos en las expertas manos de Jean.
_ _ _ Las voces volvieron, parecían decepcionadas, hablaban de un maestro, de que el experimento 168 había finalizado, todo oscureció, y un estallido de luz, me dejo ciega, con tanto dolor, que me hizo caer de rodillas, noté cálida arena entre los dedos, un olor característico inundó mis sentidos. Abrí lentamente los ojos, estaba en mi tierra, en mi mundo. Quise llorar, pero no pude, pues larga es la tradición de llorar sólo en honor a las muertas. Fui incorporándome, entonces, fui consciente de que no estaba sola. Muchos seguíamos heridos, hablamos de lo ocurrido, nos vengaríamos.
_ _ _ Cuarto, cual sabueso, en busca de un olor que sólo él podía identificar, andaba sin rumbo aparente, siguiendo una pista, que nadie veíamos, estaba abstraído de todo. Hasta que vencido, una mueca asomó, y nos explicó. Nos llevaron y sacaron, de una especie de mansión mágica, cuyo extraplanar perdió, pues ante unos arcanistas poderosos nos enfrentábamos.
_ _ _ Regresamos a su lado, mediante portal, y nuevamente mis tripas se quejaron, aparecimos en Nevesmortas. Odio, la magia, odio a Cuarto, pero por encima de todo, hoy odio a esos brujos, mi lista iba en aumento, pero tenía mis prioridades. Ensayaré contra ellos, lo que le haré al “Secuestrador”.
_ _ _ ¡Maldita afición la de los brujos!.
Personajes participantes: Cuarto, Cyrus, Jean, Sefiya, Taron, Zalcor y Dahyâ
Escena guionizada por: QM-Hial y QM-Kelemvor
Dahyâ.