Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

La fuente es el lugar donde todos los acontecimientos de la Marca son comentados. (Foro "on-rol" del servidor)

Moderadores: DMs de tramas, DMs

Travelmtb

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Travelmtb »

Otro dia en Nevesmortas, Travel como de costumbre avanzo hacia el tablon para ver si habia algo interesante. Leyo el mensaje de Aku y sin duda se apunto, una forma facil de saquear algo de oro y poner en practica sus conjuros.
Mientras esperaba a que llegase el dia en el que partiesen en busca de aquella aventura, se acordo de que Aku le habia hablado de un Liche en el bosque cerca de Ascore. Sin nada que hacer, muchos tesoros y un poder inimaginable en su mente, se decidio a ir hacia aquel lugar.
Los esqueletos del bosque caian uno a uno gracias a la ayuda del elemental convocado, pero algo extraño llamo su atencion, en la lejania habia un mago Umbra. Se apresuro a meterse en aquel templo el cual no aseguraba su seguridad pero si daba algo mas de confianza. Despues de acabar con los golems y ver que nada podia hacer alli, decidio salir de su refugio temporal y cual fue su sorpresa que se encontro con una docena de Umbras rodeando la zona. Travel, confuso y desorientado, poco pudo ver antes de que instintivamente pronunciase las palabras e hiciese los gestos que le llevarian de regreso a Nevesmortas mediante un Teleportar. Alli pudo encontrar a un grupo numeroso de aventureros a los que les explico lo que ocurria y lo que pretendia, habia que llegar al bosque del liche cuanto antes y descubrir que estaba ocurriendo.

//Perdonad que no ponga las tildes, pero es que el teclado me falla
Shamandalie_Vethas

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Shamandalie_Vethas »

//antes que nada pido perdón por la calidad de lo que voy a redactar y la veracidad absoluta de los hechos (y eso que todavía no lo redacté xD), ya que acabo de mezclar las historias anteriores (de las cuales no tenía idea) con mi repaso de biología... >.<


Era un día ordinario para Vethas en Neves, asi que, como todo día ordinario, le dio al tablón su cotidiana visita. En seguida reparó en el montón de anuncios que decían más o menos lo mismo, algunos de personas a las que les tenía mucho aprecio: "Aventureros!". Parecía que un tal Aku estaba reuniendo fuerzas para realizar una tarea exploratoria, al parecer referida a orcos. "Vaya, parece que Kael y Malekith se apuntaron a la expedición, más vale estar presente por si algo sucede".
Apenas había terminado de colocar su respuesta en el tablón, que Malekith estaba saludándola desde la fuente. Luego de ponerse al día en cuanto lo personal (y de molestar a Thorsteinn, como Vethas hace casi cada vez que lo encuentra casualmente en la villa), un hombre de túnica negra (Travel) apareció casi desesperado, corriendo quién sabe de donde.
Llamando la atención de los presentes y algo entrecortado, explicó su situación. Había visto Umbras, varios de ellos, cerca de Ascore, y quería reunir a un grupo para averiguar que era lo que estaba pasando. Vethas no era lo suficientemente avispada como para comprender lo extraño de la situación pero si para saber lo grave que sería la expansión de Umbras más allá de sus territorios, y animada por las reacciones de quienes estaban presentes, accedió a la misión. Pronto se sumaron el enano Dublin y un tal Quil (así el llamaban), y por último, el mismo Aku, quien por fortuna pasaba por allí. Thorsteinn sin embargo, se había quedado en Neves hasta donde Vethas había visto.
Organizados de una manera no muy estructurada se dirigieron con rapidez hacia la entrada del bosque Voldron, donde una niebla comenzaba a envolver los pies de los aventureros.
Fue mucha la sorpresa de la guerrera al ver allí mismo a Kael y a Thor...
"Supongo que Thor le contó a Kael de la expedición y no dudó en venir, y viendose abandonado, el pelirrojo lo siguió" - pensaba Vethas, a quien el espiritu del joven Hachasangrienta casi le parecía ridiculo para su apellido.

La bruma que salía del bosque se hacía cada vez mas densa, y no sabían cuanto tiempo tenían para actuar. Finalmente se decidió que mandar a alguien que pudiese describir mas o menos el panorama que tenían del otro lado del lindero sería lo más sensato antes de adentrarse, por lo que Vethas se introdujo sola en el bosque, adelantandose bajo los efectos de una poción invisible y caminando antes de que se arrepintiera de lo que hacía.

Una vez dentro, rebuscó alguna estrategia para pasar desapercibida, sin confiar demasiado en los efectos de la poción. Se quitó las placas de su armadura, que hacían ruido al moverse, y vistió de manera en que más pudiera mimetizarse con el bosque. Caminaba bordeando la zona, cerca de los árboles, tan sigilosa como una inexperta de la batalla que acostumbraba a ir de frente hacia el objetivo podía ser. Avanzó y vió algunos cadáveres, que por extraño que parezca no le hicieron detenerse demasiado. Siguió caminando entre los árboles hasta ver un muro arruinado, no muy extenso, y cerca de ello, alrededor de cinco Umbras haciendo guardia. Agudizó su oído, quizás lo único que haya heredado de su madre elfa, y escucho una conversación más lejos. Provenía de un lugar al que no podría, de ninguna manera, acceder sin ser detectada. En eso pudo ver sus propias manos materializarse en el aire y supo que la poción ya no le hacía invisible, por lo que salió corriendo sin mucha cautela. Fue interceptada por una porción de un ejército de orcos que allí estaban, junto a las umbras que había visto anteriormente. Huyó exitosamente de casualidad hacia la entrada del bosque, donde los demás esperaban ansiosos las noticias.

Jadeante, solo pudo decir con la plena atención de todos palabras como "ORCOS", "MUCHISIMOS", "UMBRAS", "CONVERSACION", y una súbita ocurrencia: "PACTO!". A los dos segundos el grupo se había descontrolado, se reflejaban preocupaciones por parte de algunos (en especial de los arcanos presentes) y deseos desmedidos de adentrarse y acabar con lo que fuese que se gestara allí dentro del bosque (más por parte del impetuoso Dublin).
Cada segundo contaba, pues orcos y umbras ya debían estar preparándose para la batalla. Rápidamente, los aventureros intentaron idear una estrategia, una que probablemente haya sido efectiva. Pero entre tantos jadeos solo se había acordado algo tan poco elaborado (y en esa situación, ineficaz) como encabezar el grupo con quienes manejaran espadas, hachas y puños, y dejar a los arcanos actuando en segunda línea. Entraron en desbandada, mal guiados por la experiencia básica de la joven guerrera, y acosados por el tiempo, que no les dejaba idear democráticamente algo mejor.

Al pasar la entrada neblinosa del bosque (esta vez todo el grupo junto), se desató una masacre sangrienta de la que Vethas no pudo enterarse demasiado. Permaneció largo rato en el suelo, inconsciente, antes de volver a la realidad. Varios de sus compañeros habían corrido su misma suerte, pero el mago de túnica negra (Travel), y el joven Kael se habían encargado de que la situación no tuviera resultados mas trágicos. Poco a poco, los heridos fueron poniendose de pie, mientras no muy lejos se escuchaba el paso de orcos y se sentía la presencia de una magia tenebrosa en el aire. Los orcos que habían acudido, sin duda de la tribu del Colmillo Ensangrentado, yacían en el suelo por obra y gracia de los dos arcanos que habían quedado en pie.

Pegada a Kael, como siempre ante una situación de crisis, Vethas tropieza con el cuerpo inerte de una pantera negra con rayas rojas, algo apenas peculiar para ella, menos en aquél momento. "Debió ser alguna de esas bestias que los mágicos convocan para que peleen por ellos" se dijo a sí misma sin darle demasiada importancia.

El grupo avanzó, ya sin demasiado sigilo pues era imposible pensar en ello habiendo dado una batalla terrible pasos atrás. Divisaron a los umbras y los mas impacientes se avalanzaron sin medida. Una nueva batalla comenzó, y desde atrás se oían los gritos de ¿Kael? ¿Malekith?, era imposible saberlo, pero el mensaje era claro: "DEJEN ALGUNO VIVO, NECESITAMOS INFORMACIÓN!".
En vano gritaron, aunque Vethas y varios de sus compañeros se habían percatado de lo vital que sería capturar a uno de los Umbras, parecía que había gente deseosa de mostrar sus trombas de proyectiles mágicos volando dramáticamente por el aire e impactando sobre el enemigo, así como filos desmedidos que atravesaban todo lo que se cruzase.

Finalmente solo quedaba un mago umbra, al parecer, un líder, esperando a los aventureros con intención de morir luchando. Kael le lanzó su mano aferradora (esa que Vethas ya había visto una vez), pero el mago resistió. Casi al instante, por un fugaz momento, parecía que Malekith habia encontrado la manera de apresarlo...
Pero fue cuestión de un segundo, menos.. de un parpadeo, para que el mago terminase inmóvil sobre el pasto, aparentemente el filo de un arma o el impacto mágico de un conjuro había puesto fin a su vida, antes de que su autor se diera cuenta de que el objetivo estaba cumplido.

Heridos, y ya sin un peligro inmediato al que enfrentarse, Malekith y Travel dieron conciencia a los demás de la gravedad de de lo que acababan de presenciar los aventureros.
"Han reparado acaso en las panteras que nos atacaron en la entrada del bosque? No eran ejemplares comunes, tenían rayas rojas sobre su pelaje. Esas bestias solo pueden significar una cosa, y no es muy alentadora... Son criaturas de Málar..."
Perplejos, parecía que lo que se avecinaba era aún peor, si era posible eso... Umbras? Los orcos del Colmillo Ensangrentado? La deidad caótica y sanguinaria de las bestias? Que relación había entre todo aquello?

//Otra cosa que quiero aclarar es que quizas la historia gire mucho en torno a mi pj porque no recuerdo bien la participación exacta de todos los demás, muchos eran desconocidos para mí, pero el que quiera que lo edite con más detalles, es bienvenido a darme su versión.
Malar
Mas pesado que Rusillo con los Tejones.
Mensajes: 1941
Registrado: Mar Feb 03, 2009 6:00 am
Ubicación: Plano de la Furia

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Malar »

hitman007 escribió:*Un mensaje Oficial de la Orden de Caballeros aparece en la fuente de Nevesmortas*

Todos los interesados en unirse a la "Campaña del Norte" se realizara una
reunión en el teatro de Nevesmortas.

Es importante la asistencia de todos los que tengan información.

El problema de estos peligrosos Orcos le compete a todo el mundo que quiera defender
su hogar, también compartir información que tengan sobre ellos.

NOTA: Por parte de la Orden de Caballeros Nevesmortas no se contratan mercenarios.
La Bestia (parda)
Shamandalie_Vethas

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Shamandalie_Vethas »

//Sigo desde acá los ultimos sucesos de la Quest aunque no estaba segura de si era el lugar correcto.
hitman007 escribió:Después de mi ausencia al volver a Nevesmortas llego un contingente de la guardia de plata, no estaba muy seguro de lo que pasaba, las ciudadanos también pasaban la mirada por los guardias, sin saber que podía ser. Nos reunimos unos cuantos para indagar la presencia de estos guardias de plata, Vethas opino que debíamos preguntarle a la Dama Lanzagelida, muy cierto, no se por que no se me ocurrió antes.

Al entrar parece que me buscaban, La Dama me presento al Capitán Anderlith quien dijo buscar al cazador de brujas, apodo que las cazadoras me dieron hace ya hace mucho, con Vethas, Nyx, Kirath, Derum y Talin partimos a toda prisa para Argluna donde nos encontraríamos con Walax, tal vez conocían la posición de alguna bruja.

Sin descansar corrimos hasta el puerto de Sundabar, llegamos a tiempo para tomar aire y reponer nuestras energías para luego partir cuando se ocultara la luna.

Llegamos con Walax, quien tenía información sobre los orcos colmillo ensangrentado que se avistaron camino al desierto, nos preguntamos que podían hacer ahí, deducimos que podía, estar buscando objetos del antiguo imperio de Natheril, aun que sonara imposible que esos tontos orcos sepan algo que ni los mismo eruditos conocen a la perfección, en ese momento de la nada apareció Alud como es típico de él, por suerte el guardia era paciente y no le saco golpes de la reunión, Walax me dio un pendiente para llamarlas si ocurría una urgencia, pendiente que colgué junto a mi collar.

Salimos de Argluna para que la arcana Nyx nos teleportara hasta bifurcación, era lo más cercano que nos podía llevar para no perder mucho tiempo, tomamos un pequeño descanso y nos alistamos para un posible combate con los umbras, nunca se puede hablar con ellos aunque quería intentarlo pero como siempre con ellos es imposible, solo alertamos un grupo de ellos pero continuamos sin mayor problema, lo que seguía era llegar al oasis, tal vez los pobladores sabían algo o vieron algo. Cuando llegamos fue un poco difícil de que el mercader nos comentara algo, después de varios minutos de convencerlo para que nos comentara, nos dijo que no había visto orcos pero si gnolls, se fueron a un lugar al norte de ahí que estaba cubierto por oscuridad, ellos mismos enviaron exploradores pero que de tantos que fueron solo uno volvió, no sabían que buscaban esos orcos.

*Fragmento sustraído de la orden de caballeros*
Shamandalie_Vethas

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Shamandalie_Vethas »

Diario de Vethas Plentens
*Se notan parrafos enteros escritos con una caligrafía poco apliacada, e incluso cada texto parece estar redactado desde angulos diferentes, por lo que se deduce que se ha ido escribiendo a lo largo de un viaje. Miles de notas marginales bordean la historia principal, pero más allá de la desprolijidad, el relato tiene un orden claro y legible*

[...]Puerto de Sundabar - A las cuatro horas, bajo las estrellas:
Amanecía como cualquier otro día en la villa. Como siempre, corriendo de un lado a otro en busca de puntas para flechas y con los miles de pedidos en la cabeza... (es que acaso no queda otro carpintero en Neves?). Pero apenas me detuve a examinar si había nuevas noticias en el tablón, no pude evitar reparar varios grupos uniformados que plagaban la villa. Primero solo se veían algunos, hablando seriamente entre ellos y manteniendo vanidosamente aires de misterio, pero pronto la comitiva se hizo mucho menos sútil. Se multiplicaban en un abrir y cerrar de ojos! Algunos corrían en dirección a la Mansión Lanzagélida y entonces supe que lo que estaba pasando era serio (Bueno... como para no dudar... no?).
En seguida encontré a Zenhit en la fuente, algo extrañado. Le pregunté si sabía algo pero el enano hasta entonces ignoraba el por qué de tanto alboroto. Algunos curiosos empezaron a sumarse, entre ellos un mago de azul (Talin), la arcana Nyx y el pastor Kirath (en un primer momento supuse que era un druida, la vestimenta lo delataba).
Luego de preguntar en vano a los "soldados extraños" fuimos directamente a averiguar a la Mansión de la Dama (cosa que se me ocurrió a MI, ja! Si era por Zenhit tdavía nos quedabamos esperando) y apenas entramos Zenhit fue recibido con honores, por la misma Lanzagélida.
"El señor Anderlith (así era?) lo estaba buscando maese" fue lo que ella dijo. Allí mismo, a su lado, había alguien de muy alto rango de la Guardia de Plata (Supongo que un capitán), a cargo de los soldados que estaban apostados en la villa. Nos comunicó que la Dama Walaax esperaba a un representante de la Orden de caballeros en Argluna, se ve que para darnos una misión o dato importante. Supe que tenía que ver con los orcos: Ni me había percatado de la presencia de raros "luceros" en la sala principal que Kirath musitó en voz baja: "Son heraldos, el peligro se cierne de nuevo sobre nosotros", y asocié.

Sin más, vinimos al puerto de Sundabar a toda prisa a esperar el primer barco de la mañana. En el camino se nos sumó otro enano (Derum), sin duda confundido por la presencia de los soldados de plata. Me parece que soy la unica emisaria de la Flecha, asi que mejor sigo está compañía a ver en que puedo ayudar.
El más preocupado es Kirath... No sé exactamente lo que vió en esos fueguitos, pero no se lo ve bien...


[...]
Taberna del Roble "no-sé-qué-más" (Pero es muy linda, cabe mencionar) - 15 hs. *parece escrito bien de prisa*
Acudimos adonde la elfa arquera nos esperaba, y atrás había un unicornio! (Intente no mirarlo demasiado, era excesivamente PERFECTO para mi gusto). La taberna tambien estaba llena de guardias, creo que la tomaron como un cuartel. No se nos dijo mucho: La fuerza orca se estaba adentrando al desierto pero... por qué motivo? Se intuía que tenía que ver con el Nezher. Los arcanos (como siempre, bah) tomaron los libros que llevaban encima, acerca del desierto y de la magia nezherina (Creo que asi se le llama) y los ojearon desesperadamente en busca de soluciones.
En seguida supe que esa tarea no nos iba a llevar a ningun lado (y no fui la unica que lo opinó, Derum dijo lo mismo. Me gusta como piensa ese enano) y propuse ir nosotros mismos a buscar información. La Flecha tiene contactos con los mercaderes del oasis Elah Zhad y supuse que ellos deberían de saber si algo raro pasaba. La elfa sonrió ante la idea, y sin tener otro plan mejor estamos saliendo hacia allá, pero antes de partir, le entregó a Zenhit un pendiente. Dijo que serviría para llamar al unicornio y a su ejército de arqueras. Ah... Tenemos a alguien nuevo sumandose a la expedición: Alud. Hubiese sido preferible que no entrara con dos botellas de cerveza en la mano. Creo que no le gustó a Walaax...

PD: no pensé que Kirath era tan negativo y desesperanzado
PD2: Sin duda vendré a tomar unas copas de vino aquí más tarde!


[...]
Oasis de la Luna - Antes del amanecer
Nos retrasamos bastante por culpa de esa niñata Nyx, y Zenhit tuvo que ir a buscarla mientras Talin, Kirath, Alud, Derum y yo nos defendíamos de los aguijoneadores (que insectos espantosos, tsk). Alud divisó huellas inusales en la arena. Sinceramente no sé como hizo para verlas con el viento, pero nos informó en seguida que se trataba de Gnolls. Que démonios hacen aqui esas criaturas? Apenas llegamos al oasis, expuse abiertamente mi condición de miembro de la Flecha y en seguida el mercader me reconoció. Tuve que "apretarlo" un poco para que nos contase lo ocurrido, pues parecía muy poco dispuesto a hablar (Espero que la dama Xaelerys no se entere que hablé en nombre de la compañía para coartarlo, jejeje).
Al norte de este oasis hay una zona llamada La Espada. Nos contó que hacía un tiempo, el oráculo bedin predijo un acotencimiento espantoso en esa zona, y desde entonces los que habían ido a ver de que se trababa no volvieron. Desde luego, la comunidad se asustó y se vetó la zona, se borró de los mapas y se deshicieron los caminos, lo cual no es mucha ayuda para nosotros. Le prometí que nuestra compañía (La Flecha) ayudaría en todo lo posible, para que nos dijera algo mas, pero que no podíamos hacer nada hasta no saber que se avecinaba.

*Nota marginal: RECORDATORIO PARA MÍ: DEJAR NOTIFICACIONES DE ESTO EN LA FLECHA YA MISMO ANTES DE QUE ME MATEN (Pero antes de hablar, ponerme el armadura pesada)*

Así que allí vamos, donde todos aqui temen y el mundo desaparece. Qué inteligentes que somos *sarcástica*

Alud, deja de mirar, no hay nada interesante aqui *en letra grande*

[...] Pináculos árboreos, La Flecha Del Destino - A medianoche
*la letra ahora si se ve algo relajada, y al menos esta vez respeta renglones*

Salimos a la zona prohibida, lo que encontramos nos aterró: Un ejercito entero de orcos del colmillo (y gnolls uniformados de la misma manera) se encontraban petrificados. Sí, petrificados! Es como si hubiesen estado moviendose hasta ultimo momento, y se trataba de un asentamiento organizado. Se los veía cocinando, afilando armas, o en posición de caminar.
Todavía no sabemos que rayos sucedió exactamente, ni hace cuanto tiempo están petrificados. El mago Talin sufrió una descompensación apenas llegamos... Parecía que se había desmayado con una sonrisa en la cara, muy raro... No podíamos "volverlo a vida" y las horas pasaban. Zenhit sin embargo, parecia ni darse por enterado de la gravedad del asunto.
Al menos unos cien orcos petrificados, gnolls, bestias, un compañero desmayado por efectos mágicos que nadie sabe, y el idiota ni atinó a utlizar el pendiente! Exceptuando a Nyx (que no la ví para nada dispuesta a defender a un compañero caído ni a pelear contra nadie), y a Kirath (//Que ya no nos acompañaba), nuestra sociedad se amotinó contra Zen. La discusión ardía ya que esa cantidad de orcos podría, quien sabe, volver a la vida, y sería nuestro fin. Mientras tanto, Nyx envió a uno de sus "animalitos" (No sé como se llaman, esos bichos que siempre hacen aparecer los magos de la nada) a la zona de petrificacion, y no nos sorprendió ver que este instantaneamente se volvió de piedra.
Con los gritos, Talin volvió a la conciencia y describió algo como que había sido tocado por la magia en estado puro. Nos dijo lo que le parecía: (anoto lo que CREÍ OIR)
"Hace un tiempo un acontecimiento magico de gran magnitud, colosal, se dió por aqui. Este lugar aun conserva residuos de magia en estado puro, muy inestables! Los orcos no tuvieron suerte" De seguro, eso era lo que buscaban en el desierto: La herramienta mágica que originó tal catastrofe.

Ahora, una nueva preocupacion nos invade: Debemos temer a los orcos... o aquello que están buscando? Todo lo que sé de ese "artefacto magico" es que tiene que ver con la magia Nezeherina...

Espero que el idiota de Zenhit ya esté reportando sobre esto... Supongo que el pesimismo de Kirath era acertado.
Talin

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Talin »

DIARIO DE TALIN

Después de tanto tiempo he encontrado lo que buscaba. Sabia que si podía encontrarlo seria en el Anaurokh.
Todo comenzó con la llegada de la guardia de plata a Nevesmortas.
Kirath y yo nos encontrábamos en la villa y nos llamaron la atención, nos dirigimos hacia un grupo al cual le sorprendio tambien los recien llegados. Entre ellos estaban Zenhit y una guerrera llamada Vethas, quien tuvo la idea de ir a preguntar a la señora Lanzagelida .
Alli nos encontramos con un contingente de guerreros y su capitan, quien, nos informó que estaba buscando a Zenhit para que reuniera un contingente de guerreros y se presentara a Argluna con ellos para ser recibidos por Walax, líder de las cazadoras elfas.
El grupo al mando de Zenhit quedo formado por: Kirath, Vethas, Derum, Nyx y yo mismo. Partimos hacia argluna donde nos reunimos con la cazadora y nos reveló que los colmillos ensangrentados habían enviado un contingente al Anaurokh .
Al no ponernos de acuerdo ni deducir sus intenciones decidimos ir al desierto e investigar.
Se había unido al grupo un explorador llamado Alud, quien nos guió al oasis con sus extraordinarios conocimientos del terreno. Allí pudimos hablar con un mercader quien nos informó (gracias a Vethas) de que Gnolls habían estado por los alrededores y se habían dirigido a un lugar del Anaurokh llamado la espada.
El comerciante Bedil nos contó que esta zona estaba prohibida para su raza ya que había acontecido algo extraordinario en la zona y todos los que se habían acercado no habían vuelto.
Al alba partimos hacia la zona y Alud advirtió de pisadas de gnolls. Avanzamos con cautela y no tardamos en entablar batalla con un pequeño grupo de ellos.
Después del incidente divisamos una zona de oscuridad y dedujimos que ese era el lugar que nos indico el comerciante bedil.
Alud se adentro en ella mientras discutíamos nuestro siguiente movimiento. Regreso al poco tiempo y nos informo de que había divisado el ejercito pero que todos estaban petrificados.
Esta vez fuimos a investigar Alud y yo a la zona de oscuridad sin ni siquiera saber que lo que acontecería seria lo mas importante de mi mísera existencia.
Llegamos al lugar indicado por Alud. Efectivamente y como dijo Alud delante mío se encontraban las estatuas de piedra que antaño fueros seres. Una extraña niebla cubría el lugar eso me llamó la atención y al observarla me di cuenta de que no era niebla.
Lo siguiente que recuerdo es haber despertado entre los brazos de Alud, Derum y Vethas con todo mi cuerpo dolorido y con la sensación de haber tocado el cielo o mejor dicho vislumbrado. La extraña niebla era el residuo de una poderosísima magia en estado puro. Quien o que lo había provocado, lo desconozco pero cuando “toqué” la magia en estado puro sentí la sensación mas placentera de mi insignificante vida. Lo que experimente es imposible de describir pero, cualquier otra sensación experimentada hasta entonces palidece y se vuelve insignificante ante tal sensación.

Desconozco que sucedió allí pero he estado recopilando toda la información que he podido sobre el Anaurokh para desentrañar el enigma y advertir de que están tramando los colmillos ensangrentados. Una vez resuelto el problema he de volver al lugar y retomar las investigaciones que había dejado apartadas......
Malar
Mas pesado que Rusillo con los Tejones.
Mensajes: 1941
Registrado: Mar Feb 03, 2009 6:00 am
Ubicación: Plano de la Furia

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Malar »


El frío provocaba que, al respirar, el aire caliente que expulsaba por su nariz se condensase en una densa nube que desaparecia en cuestión de segundos. Llevaba un buen ritmo de marcha, su remendada armadura de cuero le permitia hacer largos tramos corriendo sin notar demasiada pesadez. De su cinto pendían un par de hachas de exquesita fabricación, una artesania desconocida por él, pero no por ello ignorada o menospreciada.

Divisó unas huellas en la nieve. Si bien él no era experto, hasta un ciego se habría dado cuenta de que la nieve esta pisoteada y se habia mezclado con barro. Siguió el rastro y llegó a las afueras del que fue el antiguo campamento de La Horda, donde algunos años atrás, sus Hermanos vivian y de donde fueron expulsados vilmente. Sabia que por allí rondaba orcos y, probablemente, también gnolls, pero no le asustaban. Observó en la lejania sin dejarse ver mucho y vio un grupo mixto de Orcos y Gnolls. No calculó bien su peso y un pequeño risco donde estaba, cedió, delatándole y haciendo que los animales cercanos huyeran despavoridos mientras que orcos y Gnolls se fijaran en su posición. Al escuchar los gritos de guerra de sus enemigos se preparó: tomó su par de hachas y se lanzó al combate confiado en su habilidad para luchar con sus dos hachas predilectas.

El primer orco se lanzó a por él raudo, pero sin calcular las distancias, momento que aprovechó para desviar el golpe con su arma izquierda mientras que con un fuerte golpe de la derecha, su hacha se hundió entre la clavícula y el cuello. Mientras tanto, un par Gnolls aprovecharon para usar sus arcos y tratar de acribillarle, con escaso éxito. Un segundo y tercer orco se lanzaron en conjunto para ser mas efectivos sin saber que los reflejos del "grandullón" eran mas que suficientes para evitar sus descoordinados ataques. Un giro en el último momento les dejó dando un golpe al aire mientras que a Gorfuk le dejó unos instantes para asestar sendos hachazos en las espaldas de aquellos dos desgraciados que cayeron al suelo con el espinazo roto y manchando la nieve de color carmesí. Justo unos instantes después, sintio su espalda aguijoneada y se arrancó, dejando las puntas dentro de su carne, un par de flechas certeras lanzadas por los Gnolls. Tan rápido como pudo cayo sobre aquellas hienas despidadas a las que apenas dio tiempo a tirar su arco y sacar sus armas de combate cuerpo a cuerpo.

Limpiandose un poco de la sangre y suciedad de encima con su capa, escupio al suelo. Una maniobra más como esta, y podría no haberlo contado. "Bah", se dijo, "Todavia no he encontrado a ninguno de esos bastardos que sepa hacerme frent..." Se interrumpió a si mismo: habia escuchado un cuerno de guerra. Problemas. Más de los que él se podría ocupar. Tenia que salir de allí como fuese. Se encaminó de nuevo en la dirección por donde había venido, por Adbar. Apenas corrió unos metros cuando un grupo de batidores Gnolls le cerró el paso. Trato de buscar un modo de escapar, no tenia tiempo que perder. Se fijó tras sus pasos: un enorme grupo de orcos se dirigía hacía él. Debía darse prisa, los dardos Gnolls pasaban silvando delante suya. Optó por la vía fácil: se lanzó al combate directo con el afan de romper la inestable formación de Gnolls pero no cayó en la cuenta de que aquellas criaturas le habían tendido una trampa: una de sus piernas quedó atrapada en un agujero estratégicamente colocado, el cual no pisó en el camino de vuelta. Perdió un tiempo precioso, suficiente para que los orcos llegasen a él. No importa, moriria luchando, una muy buena y digna manera de hacerlo. Dio algunos tajos a piernas (ya que estaba de rodillas debido a la caida) momento en el que escuchó: ¡Lo quiero vivo! Fue lo ultimo, un duro golpe en la cabeza le hizo perder el conocimiento.

No vió como un Capitán Orco se abría paso a golpes entre sus filas y, tras examinarlo de cerca, ordenó a gritos que le sacaran del agujero. Una patrulla de Gnolls lo abandonó mas tarde cerca del camino de Adbar donde, aterido, despertó sin entender nada...
La Bestia (parda)
Gorfuk

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Gorfuk »

Pero que..... Se palpó como pudo, sin entender muy bien lo que había pasado. Echo mano a sus hachas y comprobó que todavía estaban, su armadura seguía siendo la misma, de cuero, vieja y remendada, pero efectiva y ligera. Se incorporó, miró al cielo:¿Cu... cuanto tiempo...? Reconoció el camino de vuelta y así lo hizo, volvió primero al campamento de La Horda, a ver a sus Hermanos y, sobre todo, para hablar con Anager acerca de lo sucedido. No le encontró, asi que se dirigió a la Villa. En el camino se encontró con su recientemente admitido Hermano, Derrell, y mas tarde con Froi y Khay. Les contó lo que le sucedió

Acordó con su Hermano Derrell que cuando viese a Anager, le contase lo sucedido, si no lo hacia él personalmente antes. Froi hablaba acerca de que podrian haber "usado" al semiorco.... sin que él lo supiese. Una trampa de las brujas.... Khay parecia turbado.....


Froi, no lo entiendo ¿por qué motivo me han dejado vivo? ¡E intacto! La mole estaba turbada, no alcanzaba a entender los porqués ¡Esos bastardos mataron a Jaina y, sin embargo, a mi me han dejado vivo! ¿¡Por qué!? Se llevó la mano a la cara, totalmente frustrado, sin comprender lo que había pasado ultimamente. Khay alzó la mirada a Gorfuk al escuchar el nombre de Jaina, algo de lo que el enorme semiorco se dio cuenta ¿Que... qué te pasa? Khay clavo su mirada en él, seria: Hoy.... hoy se me ha aparecido en sueños.... Agachó su mirada al suelo y jugueteó levemente, sin interés con unas briznas de hierba. Aquello le dejo noqueado.... Froi seguia insistiendo en que era una trampa, que hablase con los de la Orden de Magos. Gorfuk, ¿de donde viniste? La pregunta era clara, directa. No.... no lo se. Me recogio un Druida, Dexter Paine, pero lo único que recuerdo es que el bosque donde vivia estaba casi siempre nevado..... había montañas cerca.... Trataba de recordar sin mucho éxito No lo se Khay.... Y no se si quiero saberlo. Estoy aquí, con mis Hermanos de La Horda y en la Villa y.... Khay le interrumpió Busca tus orígenes Gorfuk.... solo así sabrás el porque de lo que te ha pasado y porque los Orcos Colmillo Ensangrentado te dejaron vivo.

Khay, ¿no insinuarás que mis orígenes son...?
Última edición por Gorfuk el Mié Feb 03, 2010 5:26 pm, editado 2 veces en total.
Gorfuk

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Gorfuk »


Volvía del campamento de haber estado con sus Hermanos. Habían estado comiendo carne de ciervo y bebiendo grandes cantidades de cerveza por el mero hecho de hacerlo y divertirse. Cuando el jolgorio fue decayendo, se dispuso a terminar un encargo: su compañero barbudo Gorm tenía que hacer un hacha de hierro.

Llegando a la puerta Norte de Nevesmortas, justo cruzó el puente que hay al Oeste, un humano (al que sanó ese mismo día, por la mañana) llegó corriendo a él y le habló de manera nerviosa y desordenada. Le contó que había alguien que le estaba buscando, de capucha y túnica de color pardo oscuro, como la corteza de un roble. No le dejo entrever su cara, así que poco más podia contarle aquel desgraciado que, después de todo, le exigio dinero
Más vale que te vayas de mi vista, calvorota, si no quieres que te machaque la cabeza... ¡Te vendé unos profundos cortes esta mañana, me das una información desconcertante y me exiges dinero! ¡Alejate o usare tus huesos para limpiarme los dientes!

Tras este desafortunado encuentro, Gorfuk se quedó pensando en quien era ese personaje que le buscaba Bah se dijo Ilusiones de un inutil con tiempo que perder. Se encaminó de nuevo a la Villa, pero a poco de llegar se notó mareado. Seguramente sería la gran cantidad de cerveza que bebió en el campamento de La Horda... Un escalofrío le recorrió el espinazo como un relámpago, la vista se le nublaba, las piernas le fallaban y, finalmente, cayó al suelo inconsciente.

Abrió los ojos y se vio en un sueño, en un paraje que no había visto nunca: un pequeño claro en un bosque que transmitia una calma y paz insondables, con un pequeño camino de flores bordeado de pequeñas columnas y, al final del pequeño camino, había alguien, en actitud de rezo frente a una estatua de una persona con un arco. Se fijo y vio que quien le daba la espalda tenía una capucha y túnica tal y como le describieron. Le preguntó que, que hacía alli... No obtuvo respuesta, asi que con su enorme mano derecha le quiso tomar por el hombro y zarandearle pero no pudo: unas espinas se le clavaron en la palma justo en el instante que la puso en el hombro de aquel y la retiró dolorido. Se giro y le comenzó a hablar en un idioma que reconoció como élfico, pero no lo entendía
¿que queria decir? pensó y cuando se dispuso a replicarle, noto como las heridas provocadas por las espinas comenzaban a entumecer su mano, su brazo, su cuello y, en poco tiempo su cabeza: volvio a caer a plomo al suelo.

Cuando despertó, se encontró en una de las habitaciones de la casa de la Dama Lanzagélida y vio que, junto a él, estaba el Gnomo pequeñajo, Tuii.
¿Qué... que ha pas...? apenas podía articular palabra, su cuerpo no reaccionaba bien. Observó un par de viales vacios junto a él y el "canijo" como gustaba llamarle le contó que le encontró tirado cerca del portón Norte de Nevesmortas. Tuvo que traérle él solo hasta la casa (seguramente ayudado por un buey, a ese pequeñajo le gustaba exagerar). Vio su mano derecha vendada Tenias varias espinas clavadas, grandullón, seguramente estarían envenenadas porque he tenido que usar dos frascos, si le enseñó las espinas que se había clavado. Gorfuk se encontraba totalmente abrumado pues ¿no habia sido un sueño? Si lo era ¿como es posible que tuviese las espinas clavadas? No entendia nada.... le explicó al canijo lo que le había pasado, pero poco pudo ayudarle. Más tarde, se vio impulsado a buscar a aquel lugar. Su instinto le llevo camino de Adbar al Bosque Legendario y... allí encontró el claro, pero no había nadie. Todavia notaba el cuerpo entumecido asi que vagó sin rumbo por el bosque de Nevesmortas hasta llegar al campamento de La Horda y poder informar así a Anager.

//No se me da muy bien relatar, a ver que os va pareciendo.

//Editado por Málar, el color azul no hay quien lo lea. Por otro lado, buen relato :)
Rizletch

Re: Cazadores del Norte: el Colmillo Ensangrentado.

Mensaje por Rizletch »

Una profecía que guardaban los hijos del bosque llegó a oídos de Dexter...

"De la luz vendrá el bastado, dos garras hediendo la noche.
La fuerza de la bestia se levantará contra el guardian de los caidos.
Del vastago de la bruja nacerá el nuevo destino."

Pensó que nada buena podía deparar de esas palabras y menos pensando quien podría ser ese "Bastardo"....
Responder