Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Los trovadores de la región narran la historia de sus héroes. (Historias escritas por los jugadores)

Moderadores: DMs de tramas, DMs

Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »


Historia basada en la melodía

Historia III

_ _ _ Se levantó de la nada una tempestad, duró tanto tiempo, que nos estábamos quedando sin comida, sin mova (agua), sin fuerzas. Bajo la atenta mirada del Dios Kozah (Talos), quien nos pone a prueba. No seriamos dignas si no encontrásemos la manera de sobrevivir. Una nueva expedición se formó, con las últimas gotas de tan preciado líquido, el mova (agua). Los que quedan desangrarán a los gimal (camellos), en caso extremo se los comerán, por esperanza, morir es sólo alargar la agonía.

_ _ _ Las más jóvenes vendrán, mi hermana entre ellas, antes de tiempo, pues son nuestro futuro, y son ellas las que deberán ganárselo. El campamento formó de forma tradicional, en círculo, y las tiendas mirando hacia el interior, apenas habrá guardias, ha de guardarse las energías. Mi madre, embarazada, se quedó y nos deseó que volviésemos sanas, pues nuestro regreso, también implicaría que habríamos conseguido nuestro objetivo.

_ _ _ Llegó la hora, partimos cual último navío errante, en busca del mayor tesoro en el mar de dunas, surcamos el oleaje, bajo el viento abrasador, vagamos cegadas por la tormenta, sólo un milagro nos mantenía unidas, eso, y una cuerda que mantenía a los goouds (camellos de combate) unidos, y con ellos, nosotras, hasta que vislumbramos una fuente de luz, la seguimos, se movía, nos movíamos con ella. Llegamos a un claro, una especie de vergel de tranquilidad, un oasis de paz. Nos bajamos los Keffiyehs (pañuelos para la cabeza) que nos cubrían el rostro, pues no creíamos ver lo que veíamos. En su interior una caravana, oscura, extraña, avanzaba, llena de jaulas rodantes y unos seres reptilianos las custodiaban. Eran Asabis.

_ _ _ Una figura completamente resguardada en largas telas oscuras, llenas de interminables pliegues, era el que los comandaba. Los seguimos a toda la distancia que nos permitía la tormenta la pared de la tormenta, era una presa jugosa la que seguíamos, pero toda la tribu dependía de nosotras. Miraba a mi hermana, se la notaba tensa, nerviosa, al igual que las otras chicas, pero también ansiosa y expectante de lo que hacían las mayores. Hoy sería su bautismo de fuego, aunque yo lo pasé hace mucho, nunca se olvida la primera muerte, y esta será la primera de muchas.

_ _ _ Aquellos seres, hicieron una pausa, desmontaron y prepararon unos barriles para dar de comer tanto a las monturas, como a los prisioneros. Estaban tan seguros de que no los atacarían que no hicieron guardias. Era nuestra oportunidad, nos preparamos en la clásica formación Elah (media luna), buscando la bendición de la diosa. Montamos. las más jóvenes, entre ellas, mi hermana, a la que miré y asentí con la cabeza, saldrían detrás nuestro, lentas, resguardando la energía, para luego, corriendo, echarse encima para asestar el golpe final.

_ _ _ Tras la señal convenida, hicimos avanzar a nuestras monturas al paso al principio… al trote después, para que fueran preparándose para la batalla los camellos, desenvainamos… al final forzamos el galope… antes de llegar al campamente, formamos en cuña a la carga. El efecto sorpresa y nuestro de grito de guerra, los aturdió en un principio, pero a la criatura cubierta, no parecía haberle hecho efecto alguno, pues reorganizó una fuerte defensa en torno a él.

_ _ _ Aunque acabamos con los de la periferia con relativa facilidad, el combate cerrado del interior del campamento igualaba las tornas, la magia del ser misterioso nos mantenía a raya, pero no seguiría aguantando tanto tiempo, perdimos a algunas de las nuestras, muchas atacábamos a pie, pues nuestras monturas, mayormente heridas o muertas, no nos eran ya útiles.

_ _ _ En un intento desesperado, escuché como ese ser, comenzaba a emitir un tono agudo, estridente y de repente, de entre nubes de polvo, surgieron más Asabis, fue tal la sorpresa, y la cantidad, que perdimos a nuestra Shayja (líder de más rango). Mi tía, Shalira se hizo cargo, de las que quedábamos. La magia del ser misterioso, decantaba a su favor la contienda. Insuflaba una energía desconocida a los reptiloides, que aguantaron y nos hacían retroceder. Ellos luchaban por miedo, nosotras por nuestra supervivencia, tuvimos muchas bajas. Ellos también. Mi tía consiguió abrirse paso contra la guardia que protegía al líder, seguida de unas pocas veteranas. Unas bolas de fuego y rayos relampagueantes, contuvieron nuestro contrataque. Algunas aguantaron con su fuerza de voluntad dicho poder, el resto cayeron una a una ante el maligno poder mágico. Mi tía estaba rodeada, herida, sangraba, y con zonas donde los diversos conjuros mágicos, la golpearon, algunos sin efecto, otros, consiguieron romper su escudo mental, no sobreviviría, ella lo sabía, pero se llevaría a todos por delante.

Imagen

_ _ _ Su cara de sorpresa, me persigue en sueños, vio que un asta de una lanza, sobresalía por su abdomen, con la mano libre, intentaba retenerla. Una cimitarra de otros asabi se clavó entre las costillas, perforando uno de los pulmones, devolvía el favor a su atacante, clavándole su aziir (cimitarra) y, entre estertores, esputó sangre. El señor del mal, se le acercó, la agarró del cuello con su mano llena de garras. Se miraron el uno al otro. Vencedor y vencida. Todo había acabado. N'asr (Kelemvor) había reclamado el alma de Shalira.

_ _ _ De pronto, un grito, y con este, llegaron otros, era nuestro grito de guerra, Eran nuestras compañeras. Nuestras niñas, ahora mujeres. El empuje ahora era nuestro. Algunos asabi, temiendo que llegasen más como nuestras mayores, se fueron retirando, la criatura misteriosa me miró, una insondable oscuridad se apoderó de mí. Un Asabi intentó apresarme, en ese momento volví de mi ensimismamiento. Me rebelé ante mi captor, le pillé desprevenido y no pudo hacer presa, me giré, estrellé repetidas veces mi arma contra su cráneo, hasta que se lo quebré. Al volver mi mirada, su jefe, había desaparecido, y los últimos rescoldos de supervivientes, se daban a la fuga o caían bajo nuestro hadid (acero).

_ _ _ La tormenta comenzó a disiparse, una victoria, con muchas bajas, pero una victoria, al fin y al cabo. Algunos prisioneros estaban muertos dentro de sus celdas. Los Asabis, en su retirada, los fueron liquidando, sabiendo que odiábamos la esclavitud, era un duro golpe para nosotras. Era la razón más poderosa, libertad, supervivencia, más que la de conseguir alimentos y mova (agua). Fuimos liberándolos uno a uno, a las mujeres las dimos la opción de nutrir nuestras filas, algunas lo hicieron. El resto de ellas, y los hombres, vendrían con nosotras, hasta llevarlos a un lugar seguro. Nos llevamos todo lo que pudimos portar, nos apropiamos de las monturas que quedaron vivas.

_ _ _ Mi amiga de la infancia, apenas mayor que yo, se hizo cargo de nuestra diezmada partida, mi akh (hermana) sobrevivió, pero tras el combate, llegaron los nervios, al igual que muchas, vomitó y tembló, quería ir a abrazarla y darle fuerzas, pero debía aprender a ser fuerte, una amiga de ella la abrazó, ambas lloraron por nuestras muertes, los lazos de sangre, las unirán hasta la muerte.

_ _ _ Antes de nuestra partida, de regreso con las nuestras. Organizamos un funeral conjunto, usamos nuestro mayor tesoro conseguido, el mova (agua), para limpiarlas de toda impureza. Con cierto temor, excavamos un poco para darles sepultura, para posteriormente, cubrimos el lugar con rocas apiladas. El resto de muertos, los dejamos pacto de los buitres y otros carroñeros.

_ _ _ En nuestro regreso, compartí montura con un viejo hombre, quien decía ser erudito, que había salido de la tranquilidad y paz de su hogar, donde había grandes edificaciones con libros inimaginables, para estudiar nuestro idioma. Sus captores, viendo que comprendía un poco su idioma, lo mantuvieron con vida, y lo pensaban usar de intérprete de otros esclavos. Desde ese momento, hasta su marcha, mucho tiempo después, estuvo enseñándonos a algunas de nosotras, incluida yo. Del idioma Asabi. Cuyo conjunto de silbidos y de ritmo seseante me costó aprender, pero con la firme necesidad, de ventaja táctica si volvíamos a encontrarnos con nuestros enemigos.

_ _ _ Llegamos al campamento, suspiramos al ver que llegamos a tiempo, y no hubo que lamentar más bajas, una parte de la tribu, celebró nuestra llegada. Sin la tormenta, con renovadas fuerzas, avituallamiento para un largo periodo y pudiendo permitirse cubrir algunas bajas sufridas, fue motivo de celebración. Pero para algunas, las vidas de las que se fueron, crearon un agujero en nuestro corazón, al dar la noticia a mi madre, quedó postrada en la tienda. Mi hermana y yo la acompañamos, y con nosotras, aquel sabio, que, con tan buenas palabras, hizo que nuestro pesar fuese más llevadero. Durante el tiempo que estuvo como nuestro invitado, nos habló de otros lugares, de mares de agua, para nuestro asombro, y nos enseñó un poco su idioma, el común, aparte del Asabi.
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen

Sociedad VI - Bestiario II - Asabi

_ _ _ Los Asabis [Midaní] o los Laertis [Asabi y Común] son reptilianos que habitan en el Anaurokh, al igual que nosotras, son nómadas, y su forma de asociarse, es en tribus. Cada cual, está gobernada con un líder o un consejo de ancianos. Su forma de atacar, también es similar a la nuestra, como criaturas nocturnas, acechan de noche y, ocultos bajo la arena, esperan con sus cimitarras, pillar a sus presas desprevenidas.

_ _ _ Miden unos dos metros. Tienen piel gruesa y escamosa, con diferentes tonalidades de marrones con partes ligeramente verdes. Su cabeza es estrecha e inclinada, que hacen que sus ojos parezcan muy grandes. Sus extremidades inferiores tienen ángulos agudos, siendo difíciles de prever como se moverán para oponentes incautos. Pueden moverse a dos patas o con las cuatro, usando sus largas colas para estabilizarse. Su forma sibilante de comunicarse, nos dificulta mucho distinguir entre machos y hembras, ya que físicamente apenas se diferencian. Aunque sí se puede decir, que hay dos clases. Una pequeña (los Asabis que conocemos) y otra más grande, a las que llamamos "Asabis cola de aguijón".

_ _ _ Son omnívoros, por lo que los ataques, se deben más, al igual que nosotras, para conseguir los recursos para sobrevivir al desierto. Para ellos es un manjar, unas raíces, tiernas y jugosas, de unas plantas que crecen cerca de los oasis.

_ _ _ La mayoría habla su propio idioma, el Asabi, pero aquellos que trabajan de mercenarios, o acaban de esclavos de otros seres, también pueden llegar a hablar el común.

_ _ _ Hay varias historias de su origen, nuestras más sabias y mayores, nos solían contar que las niñas malas, se convierten en Asabis y acaban expulsándolas de nuestra tribu. Una vez creces, aunque sabes que compartimos similitudes con ellos, te das cuenta que son historias para controlar a las pequeñas más díscolas, aunque muchas no las hagamos mucho caso (risas).

_ _ _ Una de nuestras consejeras mayores, nos decía que, le contaron una historia, sobre su origen. Fueron creados por una raza de reptiles (Sarrukh) que al igual que los Phaerimm y otros seres malignos y poderosos, los usaban de esclavos y mercenarios. Le contaron muchas historias de grandes guerreros, que cayeron contra nuestras tribus. Tras una revuelta y con ayuda ajena, fueron liberados. Algunos formaron tribus, otros, fueron convertidos en ilícidos, siendo estos, nuevos amos de otros Asabis esclavizados.


Bibliografía: forgottenrealms.fandom.com
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen

Vivencias VIII

_ _ _ Unos rumores sobre una criatura que está hundiendo barcos me llama la atención. Me acerco a Sundabar a investigar, pues de su puerta llegan y salen los barcos atacados. Al parecer la noticia también ha llegado a oídos de otros.

_ _ _ Después de una intensa reunión con el intendente del puerto, salimos andando hacia un poblado para escuchar la versión de un testigo. Mejor que ir en barco, y ser hundidos por la bestia.

_ _ _ Todo el camino fue peligroso, pero hicimos un alto, cercano a una especie de círculo. Tan mal debo estar, que me ofrecen un remedio, debo esperar una dekhana.

_ _ _ Llegamos al poblado, hablamos con la testigo, y nos brinda información más detallada. Nos dirigimos al lugar del avistamiento.

_ _ _ Varios de nosotros vemos un enorme cocodrilo saliendo de las aguas del río, en dirección a una gruta, nos mojaremos.

_ _ _ Fue un combate de desgaste, nos hacía frente y nosotros contratacábamos, hasta que conseguimos arrinconarle. Se encuentra una nota, sobre que no hay que darle de comer. Proseguimos investigando.

_ _ _ Al final de la gruta, encontramos una guarida con bandidos y piratas. Dimos cuenta de ellos. Inspeccionando el lugar, no encontramos con un tal "Garlopo", quien dice ser el dueño de "Cucudru", iba a usarlo de familiar, pero los piratas tenían otros planes. Da pena verlo, pero también puede ser "El Basilisco" encubierto. Mediante magia y con ayuda, consigue huir en un portal mágico. Habrá consecuencias, pero no serán por mi culpa.

_ _ _ Conseguimos hacernos con un cuantioso botín y una respetable recompensa.


Escena guionizada por: QM-Hial y QM-Kelemvor
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen
Objetos personales IV - Colmillo de Cucudru

_ _ _ Al fin conseguimos acorralar a la bestia. Opuso mucha resistencia, pero la teníamos contra la pared, aún así, viéndose acorralada, no cejó en su empeño de devorarnos, e incluso aplastarnos contra su gran cola.

_ _ _ Una vez abatida, me acerqué a sus sauces, y con cuidado, precisión y paciencia, logro mi preciado tesoro, uno de sus más grandes colmillos.

_ _ _ Descansa en paz, Cucudru.


Objeto: Un colmillo de Cucudru. Otorgado por: QM-Hial y QM-Kelemvor

Ver historia (enlace)
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen

Historia I - Actualidad

_ _ _ Un destello cegador, la imagen de la más bella y perfecta de las mujeres, un triste grito nubla mis sentidos. Intento tapar la luz, cierro los ojos con fuerza, pongo mis brazos por delante, pero nada, la luz, intensa, me deja cegada.

_ _ _Al fin puedo abrir los ojos. Noto el viento a mi espalda. Consigo girarme contra la luz, y veo la negrura más insondable. Ella se acerca a gran velocidad. Soy yo la que se va acercando. Un choque violento. Una sensación de ahogo oprime mi corazón. Intento volar, nadar, hacia la luz, pero siento como algo tira de mí. Logro alcanzar la superficie, una barca y muchas luces alrededor de ella. Almas, en un intento desesperado por subirse a ella. ahora lo veo, son manos que las arrastran a las profundidades, como están haciendo conmigo. Ya no tengo fuerzas. Hice todo lo que pude. Fui arrastrada a la eternidad.

_ _ _Todo gira muy rápidamente. El viento me da en la cara. Me intento proteger. Una tempestad me rodea. Veo al ser encapuchado. Secuestrador de mi akh (hermana). Corro, vuelo, nado tras él. Se adentra en el portal. El viento le baja la capucha. Veo la cara de mi akh (hermana), grito con todas mis fuerzas. El viento ruge con fuerza, me protejo los ojos.

_ _ _Se repite la escena, se repite, y se repite de nuevo, el rostro va cambiando cada vez que lo revivo, una y otra vez, Anadriel, Azarane, Sebastián, Kamil, Cyrus, Marappi, Barrey, Seda, Izarith, Jareth, Leonora, mi madre, mi tía, mi abuela, mis amigas, mi tribu, mis enemigos, Rupio, Garlopo. Pasaron rostros familiares, amistades, conocidos, enemigos, desconocidos de caminos, no acababa nunca hasta llegar a una máscara, Sospechaba desde lo más hondo de mi corazón. Era El Basilisco.

_ _ _Me llamaba por mi nombre, otra vez, y otra, reiteradamente. De la oscuridad. De la tormenta. Surge una luz. Fui tras él. Conseguí llegar. Conseguí apresarle. Me seguía llamando. Le arranqué la máscara, tras esta, un rostro en sombras, unas facciones que nunca antes vi. Las sombras fueron tomando forma. Yo miraba con mucha atención. Era el Basilisco. Le pondría rostro. Iría a por él. De repente. Unos tentáculos surgieron. Atraparon mi rostro. Era el ilícido de mis pesadillas. Me llamaba. Decía mi nombre. Notaba un dolor punzante. Iba a más. Iba a perder el conocimiento. Intenté luchar. Removerme contra mi pesadilla. Seguía llamándome. Dahyâ... Dahyâ... Dahyâ... los tentáculos se fueron difuminando. Otro rostro tomaba forma. Fuera o no El Basilisco. Ya no podía más. Era él o yo. En un último esfuerzo, le intentaba agarrar de nuevo, pero sólo conseguía atrapar vacío. Dahyâ... Dahyâ... Dahyâ... el rostro era conocido...

_ _ _Era Cuarto que me llamaba. Ahogada. Respirando aceleradamente. Rodeada de sacerdotes. Estaba en la Atalaya del Alba. Miré con odio a Cuarto. Era El Basilisco... o no. Grité. Volví a gritar. Pedí que me dejaran sola. Soledad.

_ _ _Estaba viva. Había muerto. No volvería a ser la misma. Algo se rompió dentro de mí. Si antes tenía pesadillas, ahora no las distinguiría de la realidad. Empezó a llover dentro de mí. Entonces, recordé un proverbio Bedín.
Hataa 'anqaa alqulubi. Yati allayl.
Hasta a los corazones más puros. Les llega la noche.
Dedicado a Cuarto.
Última edición por Adamnath el Mar Jun 21, 2022 12:11 pm, editado 2 veces en total.
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen Imagen
Resumen VII - Aspiraciones III

_ _ _ No logro quitarme de la cabeza todo lo acontecido en este tiempo, he decidido deambular por los parajes en solitario, pero eso no impide encontrarme con otros mercaderes, mercenarios y aventureros. Sólo el corte de vetas de gemas y el tallarlas, mantiene mi cabeza ocupada, y a esa tarea he dedicado.

_ _ _ Busco a Cuarto, a Seda y a Azarane. Con unos u otros, he tenido conversaciones sobre El Basilisco, bien sea en solitario o encontrándome con dos de ellos. Mucha información que procesar. Incluso Azarane me enseña una prueba práctica sobre la diferencia entre reanimar y resucitar, bien saben los dioses, que conozco esto último.

_ _ _ Sigo viajando por los caminos, con encuentros esporádicos con otros. Desconfío de ellos, aunque les acompañe, o me acompañen, no puedo quitarles ojo de encima, cualquiera puede ser El Basilisco. Esta situación crea tensiones conmigo. No sé cuando podría darse el caso de un enfrentamiento, si no fuera por intereses comunes.

_ _ _ Viajes, gemas y mucha información que procesar, veremos lo que depara la dekhana siguiente.
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen
Resumen VIII

_ _ _ Últimamente no veo a algunos de los conocidos aventureros de cuando llegué a la Villa. Pero lo compensan algunas caras nuevas, intento que se acostumbren al lugar, dándoles algunas indicaciones y recomendándoles algunos mercaderes. También les aconsejo acudir a ciertas personas, para conseguir trabajos, al menos, para sobrevivir, ya que, aunque la Guardia hace su trabajo, el peligro acecha por cualquier lugar.

_ _ _ Durante este tiempo en soledad, recorro los caminos, unas veces en solitario, otras veces acompañada de Barrey, Gerrek y Rolan (a quienes recomiendo que se dediquen sus esfuerzos en modelar armas y armaduras, en vez de tirar de bueyes, no es que sea indigno estar todo el tiempo llevando estos pesados y lentos animales, pero serán tenido en más estima y mejor valorados), o de Sebastián y Kamil.

_ _ _ He dejado de coleccionar gemas, ya nadie las necesita, y para mi colección particular, son suficientes.
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen
Aspiraciones IV

_ _ _ Empezamos a hablar Cuarto y yo en La Rosa y El Martillo. La conversación fue subiendo de tono, no llegando a una discusión, pero si fue un cambio de impresiones entre el uno y el otro bastante importante. dos formas de pensar totalmente opuestas, pero quizás, con un único fin, sobrevivir a El Basilisco.

_ _ _ Cansados de las explicaciones, pasamos a las prácticas. Cuarto me quiso poner a prueba, para ello, salimos de la Villa, y a cierta distancia de la mirada de los Guardias, pero no tan lejos como para no pedir ayuda. Allí, en uno de los claros, los animales huyeron por los fuertes sonidos y espectáculos de luces. Quizás fuera de su jurisdicción o temerosos, la verdad, tampoco los guardias se acercaron a investigar.

_ _ _ Era la hora de demostrar mi temple y mi fortaleza de espíritu. Cuarto, previsor, empezó por unas pruebas, "básicas", que cualquier arcano sabría apenas fuera destetado de la madre. Ni qué decir, que me costó hacerle frente. Si eso lo mínimo que podía hacer... diría que no quería pensar en qué era lo máximo de su potencial, pero muy pronto lo sufriría en mis propias carnes.

_ _ _ No podría decir que quedó satisfecho, aunque haya superado lo que otros no habrían conseguido. El Basilisco no era un arcano cualquiera. Así que, sin apenas sudar, me lanzó algunos conjuros. Unos, apenas fui capaz de protegerme. Tuve que usar toda mi fuerza de voluntad, y a pesar de ello, mi cuerpo se estremecía. Creyendo él, que encontró una grieta en mi defensa corporal, insistió, hasta conseguir doblegarme, y tenerme a sus pies, arrodillada y sin aliento. Suspiró.

_ _ _ Esta vez era mi turno, usé todos los trucos que conocía, y alguno más que improvisé en el momento. Pero en ninguno de los casos, pude ni tocarle. Uno, dos, tres, cuatro... varios intentos, que ni me acuerdo, lo que hice. Cuarto, no sé si decepcionado, o triste, vió, que yo aún tenía que aprender. Con ira, le ataqué rememorando las arenas del desierto, y conseguí penetrar sus defensas. Ilusa de mí, ni siquiera él se había defendido en ningún momento. La lección en adelante, la habría de aprender a las malas.

_ _ _ Comenzó a conjurar en idiomas desconocidos, que sólo sus sonidos taladraban mi cerebro. Me decía que si no podía contra un arcano indefenso, como podría contra alguien tan preparado como El Basilisco, me comenzó a lanzar conjuros más poderosos, algunos sentía que me desgarraba la carne, que la hacían arder, al final, me aprisionó. Me alzó dentro de una mano imaginaria, que me oprimía cada vez más. Sólo aflojaba para cuando quería que le escuchase.

_ _ _ Debía ceder. Debía dejarme lanzar conjuros en cualquier momento por Cuarto. La magia me protegería, me decía. No debía resistirme a ella, me decía. No... no... Nunca. La mano volvía a hacer presión. Mi ser intentaba se resistía, quería morirme, en nuestra sangre, luchamos contra la esclavitud. Volvió a aflojar. Cuarto me decía que debía empezar a pensar que es muy probable que mi hermana estuviera muerta, que a quien viese, no sería mi hermana. Que debía pensar lo peor, y que quería prepararme para ello. No... no... nunca. No podía pensar en ello, toda nuestra existencia se basa en la esperanza y en la supervivencia.

_ _ _ Antes preferiría morir, que dejar de lado a mi hermana. Se lo dije. Él, decepcionado, enfadado, o quizás otro sentimiento, acabó por chascar los dedos y hacer desaparecer la mano. Caí a plomo. No volvería a enseñarme a hacer frente a El Basilisco. No me contaría que le hizo a él. Tan poderoso. Más poderoso que nunca. Gracias a El Basilisco. Sobrevivió, ahora es más fuerte. Es lo único que le importa, el poder. Cuando se iba marchando, dejándome en el suelo. Le pregunté que de escoger: Acabar con El Basilisco o salvar mi vida. El respondió que ambas. Quizás, él no haya aprendido nada, al fin y al cabo. Quizás, él sepa más de lo que cuenta. El uno al otro, nos hicimos unas preguntas, que debía responder el otro, si queríamos seguir avanzando. Quizás... no haya próxima vez.
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen

Vivencias IX

_ _ _ Una anciana, daba vueltas alrededor de la fuente de Nevesmortas, los guardias no querían escuchar sus súplicas, sus gatos... sus hermosos gatos... no sé cómo, un gato apareció en mi regazo, cuando comencé a acariciarlo, tan pronto había aparecido, desapareció. La anciana tenía unas manos ágiles para ser tan mayor, llevaba al gato, ¿o gatos?, era difícil de saber. Consiguió llamar la atención de varias personas allí cercanas, entre ellas yo. Nos contó que tenía unos gatos en su casa, pero que debíamos rescatarlos, que nos recompensaría. No parecía una tarea importante, pero al menos sacaría algunos pensamientos de mi cabeza.... al menos durante un tiempo.

_ _ _ Nos encaminamos hacia las afueras, no... se había perdido la anciana, ahora sí. Nos encaminamos hacia su casa. custodiada por una maga y un mago. Tras mucho hablar, y sin querer llamar más la atención, nos dejaron entrar, con la condición de que, si descubríamos algo, que les avisásemos. Entramos, con la intención de rescatar gatos. ¡Miau!.

_ _ _ No pareciera que sucediera nada dentro, veíamos unos gatos, y a la tarea nos aplicamos. Craso error. No sería fácil. Algunos muebles y objetos tomaron vida. Los libros revolotearon e intentaban pillarnos las manos. Los candelabros nos intentaban quemar. Se me escapaban los gatos, y cansada de todo el tumulto, acabé atontándolos. No sé en qué momento, perdí de vista a uno de mis compañeros, y vi aparecer al hijo de Rolan. Suspiro. ¿Cómo se le ocurre traer a su hijo?. Cuando ya casi habíamos acabado de echar a los gatos fuera, el niño ya no estaba. Menos mal, no era lugar seguro para él.

_ _ _ Habiendo acabado con la planta baja, pensando que la puerta hacia el piso superior estaba cerrada, le di una patada. No esperaba oírla gritar. Que susto me di. La pedí disculpas. Pero de nada sirvió, en parte la comprendía. Pues me había portado mal con ella. Me pidió a cambio de su perdón un chiste.

Se levanta un viento en el desierto y un grano de arena le dice a otro.

¡Corre, que nos siguen!

_ _ _ Parece que no debió gustarle mucho, pues no nos dejó pasar. En eso que llega el hijo de Rolan con el hijo de Gerrek acompañados por Barrey. Algo debió ver la puerta en Barrey, que nos dejaba pasar a cambio de que le tocasen suavemente el pomo. Barrey, todo un caballero, lo tocó con delicadeza y ternura, y así fue como conseguimos pasar.

_ _ _ Una vez arriba, más objetos inanimados se nos echaron encima, pero conseguimos apaciguarlos, de la misma manera que apacigüé a los gatos restantes. Nos quedaba una habitación y allí entramos, vimos una bola flotando, pero sin nadie en el grupo que supiera nada, volvimos fuera, informamos y entregamos a la loca de los gatos, los que llevábamos encima. Todo acabo bien, pero no era un buen lugar para niños.


Escena guionizada por: QM-Hial y QM-Kelemvor
Dahyâ.
Adamnath
Araña Terrible
Araña Terrible
Mensajes: 160
Registrado: Mar Sep 22, 2020 8:45 pm

Re: Lalla Dahyâ aibnat Tufayyur

Mensaje por Adamnath »

Imagen
Vivencias X

_ _ _ Me encuentro con un niño que está hablando con unos aventureros. Al parecer su abuelo cayó por un "bujero", y teme que le haya pasado algo. Me ofrezco para ayudar y nos encaminamos hacía el lugar.

_ _ _ Menudo agujero, del que bajamos ayudaros por una cuerda. Una vez en el interior, pudimos constatar la oscuridad de las galerías, mi misión, portar la llama.

_ _ _ Según íbamos avanzando, descubrimos hoyos, de los que sospechamos que salieron unos tejones. Supongo que es su casa, y por ello nos atacan. con determinación, algo de temor que se nos cayese el techo en la cabeza, seguimos.

_ _ _ Pasábamos a dudas penas por entre escombros, que raro que no hayamos encontrado al abuelete. Pero si encontramos a la madre de todos los tejones. La Gran Tejona. Aunque conseguí noquearla, hubo que sacrificarla. Encontramos unos huesos, y aunque temimos que fueran del abuelete, llevaban ya tiempo allí, así que seguimos en nuestra búsqueda.

_ _ _ Ahora sí, en una de las últimas galerías, logramos encontrarle. Un abuelo parlanchín, curtido en mil batallas, azote de orcos, exterminador de dragones, y muchos títulos más, que no recuerdo. Nos contaba sus batallitas mientras regresamos. Mala suerte, el suelo cedió bajo nuestros pies, y caímos a una gruta.

_ _ _ La antorcha sigue intacta, que duro es llevar la antorcha, más duro para ellos es el escuchar las quejas del abuelo. Algo se movía bajo tierra, y apareció una especie de cucaracha, que se nos echó encima. Cuando al fin pudimos con ella, el abuelo nos decía, lo desnutridos que estábamos, seguro que habría montado en la cucaracha y habría salido a lomos de ellas del agujero. Pero por desgracia, éramos lo "mejor" que su nieto pudo encontrar. Intenté arrancarla una pata, pero una especie de ácido comenzó a salir de la herida. Apenas logré apartar el brazo, pero viendo que no podría llevarme la pata, vacié una pócima, y la rellené de dicha "sangre".

_ _ _ Con esfuerzo, conseguimos salir, y no hubo que lamentar más contratiempos, ahora le tocaba al nieto aguantar a su abuelo. Con la tarea finalizada, todo acabó.


Escena guionizada por: QM-Hial y QM-Kelemvor
Última edición por Adamnath el Dom Jun 19, 2022 4:01 pm, editado 5 veces en total.
Dahyâ.
Responder