Amn, tierra de cofrades y mercadeo, situada al sur de la Puerta de Baldur,entre el "Bosque de la Serpiente" ,hogar de un codicioso dragon verde, y la cordillera llamada "Los Dientecillos" que alberga dos magnificas fortificaciones de la iglesia de Cyric conocidas como las "Torres Gemelas del Eterno Eclipse".
En la cabeza de los lugareños , no existe el termino "altruismo" ya que todo lo que se haga ha de ser motivado por el oro y el poder, Hacer algo sin esta intencion se considera aqui un despilfarro y una estupidez.
A pocas millas de Crimmor y bañada por el rio Esmel,se encuentra Purskul; es una ciudad de paso,una parada de caravanas obligatoria, antaño hogar de algunos clerigos de la orden de Chauntea, que fundaron un templo a su deidad ahora abandonado, ya que todos murieron a causa de una extraña y aun no esclarecida enfermedad hace pocos años.
Siguiendo rio arriba llegamos al gran lago Esmel,principal fuente economica de la ciudad conocida como Esmeltaran, donde se haya en la actualidad uno de los templos de adoracion al resurgido Bane, cuya mano insta a los ciudadanos de los alrededores a entregar a su hijo menor a la orden,quiera este o no quiera, a cambio del favor divino y la proteccion y prosperidad de la orden.
Thomas Cain es uno de los principales cofrades alquimistas de la zona, conocido y respetado por su gran educacion y civicismo, su cofradia es una de las encargadas de surtir de pocimas y otros objetos alquimicos al Imperio Syzhilisiano, y trabajan en ello conjuntamente con los alquimistas de Murann.
Su esposa Barbara Sulna, le ha dado dos hijos, Vastandy y Leonard y espera su tercer alumbramiento en un mes, al que han decidido llamar Thomas si es niño,Barbara si es niña, en honor a los bisabuelos de ambos.
Un dia al volver de un viaje de negocios a Murann, con su amigo y vecino Burt Voldo,Thomas diviso desde una colina cercana a su casa, varios estandartes que portaban varios jinetes, espoleo su caballo y raudo se acerco a ver de que se trataba, su esposa encinta dialogaba en la puerta con lo que aparentaba ser un emisario, y ahora si, mas cercano pudo ver que en los estandartes y escudos de los visitantes, se dibujaba La Mano Negra .
El emisario portaba un pergamino y parecia pregonarlo a su llegada, bajo del caballo de un salto y se posiciono delante de su esposa en actitud protectora.
-"¿Que sucede aqui? ¿A que debemos esta inesperada visita?" Inquirio Thomas que ya sabia de antemano la respuesta.
_" Venimos a reclamar a su hijo menor Leonard Cain, para su gloria y la de su familia debe servir a Bane, claro esta si vos estais de acuerdo" Dijo esto con media sonrisa el emisario, ya que el negarse a este particular les pondria en muy mal lugar frente a Bane, y ya todos en el pueblo sabian lo que esto significaba, malas cosechas, infortunios varios, fracaso economico,enfermedades..., la desgracia, al fin y al cabo, para los hijos de los hijos de los hijos de quien negara a este acto de vasallaje de la orden de Esmeltaran.
Thomas era conocedor de estos hechos y asi lo habian vivido algunos,pocos, de sus parientes y amigos, pensativo no quiso hacer ademan de negacion e intentando consolar la mirada afligida de su esposa dijo lo siguiente:
-"Señor,nos congratulamos de poder servir a su deidad, no obstante debe saber que mi hijo menor ,aun esta por nacer.Mi mujer como podeis observar esta en avanzado estado de gestación,y pronto alumbrara,este es el hijo que debe llevarse con vos, sin duda debe haber algun error." Con la maxima diplomacia posible, Thomas intento persuadir y asi ganar tiempo, al menos otros 15 años (que es la edad que debia tener cuando se presentaba la reclamacion por parte de la orden).
El caballo del emisario comenzo entonces a parecer mas intranquilo, moviendose fortuitamente de un lado a otro , el emisario miraba a Thomas con cara de repugna y dijo lo siguiente.
-"Muy señor mio, me entristece oir esto, quizas crea que las ordenes de nuestro señor se han malinterpretado...o peor aun quizas quiera decirnos que nuestro clero se ha equivocado en su decision, no obstante si decidis negaros a su peticion..."
Tiro entonces de las riendas de su negro corcel, en un ademan de partir raudo por donde vino,los guerreros y clerigos que le acompañaban reian estrepitosamente y se burlaban de Thomas, e hicieron lo mismo, preparandose para la partida.
-"No por favor , esperad, os lo ruego!!" Replico Thomas.
Entre tanto, un joven Leonard volvia de un tranquilo dia de pesca y lectura, habia pasado toda la mañana en el rio intentando coger truchas para la comida, aunque ciertamente, prestaba mas atencion a sus libros que a la tarea en si.
Al ver tal cantidad de jinetes tan bien equipados,todos uniformados, y a su padre y madre a pie en el umbral de su casa,se sobresalto sobre manera, solto su caña y el capazo de la pesca y las truchas ultimas que habia pescado cayeron brincando y dando sus ultimos coletazos de vida.Corrio entonces hasta que se puso cercano a su padre, quien le paso el brazo por encima del hombro.
-"Padre,¿que ocurre?, ¿quienes son estos caballeros?"
Y en ese momento los ojos del caballo del emisario clavaron su mirada en el joven,una mirada que pronto parecio destellear con un brillo rojizo, y comenzo a parecer aun mas inquieto y a moverse mas bruscamente, el emisario apenas lograba controlarlo.Uno de los clerigos desmonto y se acerco a Leonard y extendiendo su mano por encima de su cabeza y sin llegar a tocarle pronuncio una especie de salmo, que ponia enfermo a Leonard y nublaba su mente,sus rodillas comenzaban a flaquear.
El clerigo sonrio y bajo repentinamente la mano cerrandola y apretandola en un puño, se volvio y miro al emisario haciendole un gesto afirmativo.
-"Asi que sois vos..." el emisario y su montura se dirigian ahora a Leonard,que atemorizado no sabia que debia contestar.busco los ojos de su padre, pero no obtuvo respuesta ya que estos estaban mirando al suelo, conocedores ya de lo que se les avecinaba.
//Continuara.
Leonard Cain
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Nymiël Silvermoon
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Mitacys
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Leonard
[...] 7 jinetes avanzaban siguiendo la rivera del rio Esmel, de tanto en tanto se cruzaban con un pescador o un agricultor que les saludaba serio y con solemnidad al pasar , descubriendose y mirandoles con un temor del que aun no se percataria el joven Leonard cual seria la causa.
Cabalgaron sin descansar por dos dias, al tercero y ya al caer el sol se pararon proximos a un remanso del rio, con la intencion de refrescarse y pasar la noche,asi, montaron tiendas y buscaron algo de leña para hacer una fogata, Leonard saco su caña y abstraido en pensamientos sobre lo que habia dejado atras se separo del grupo, no demasiado, esperando lograr alguna pieza de buen tamaño que poder asar esa noche. El clerigo que habia hecho aquel ademan con la mano dias atras le acompañaba continuamente y le miraba con aires inquisitivos, mas era hombre de buena conversacion y a menudo Leonard le preguntaba sobre el monasterio, si habria mas chicos de su edad...y el tipo de cosas que preocupan a un joven de unos 15 años, el clerigo le respondia con una expresion de sabiduria astuta y media sonrisa pues la inocencia de aquel educado pueblerino hijo de comerciante les proporcionaria un tranquilo trayecto sin demasiadas explicaciones.
Dos de los guardias y el otro clerigo que les escoltaban en su viaje exploraban los alrededores en busca de algo de caza entretanto, siguiendo las huellas de patas y hocicos de jabalis que a la noche merodeaban la rivera en busca de invertebrados y frutos enterrados en el fango dieron con una apartada cienaga, advirtiendo que las huellas de los animales que ansiaban cazar desparecian en pos de unas marcas que indicaban que algo pesado habia sido arrastrado hacia aquel cenagal de aguas verdosas y sobre el que una densa neblina solo dejaba adivinar aqui y alla los tallos sobresaliantes de algunos juncos. Algo confundidos los tres se miraban encogiendose de hombros, uno de los guerreros avanzó hacha en mano, sumergiendo sus botas casi hasta la rodilla en aquellas aguas y mirando precavido alrededor. nada vivo parecia habitar aquella cienaga.
El corpulento guerrero dio media vuelta avanzando hacia sus compañeros de viaje que reian al ver las dificultades que tenia para avanzar entre el barro , pues sus botas debido al peso de su armadura se clavaban en el, haciendo costoso el avance.
-"Vamos Jonas, que es para hoy!!" grito uno de los apostados en la orilla.
La oscuridad de la noche comenzaba a hacerse dueña de la tarde, y el humano que avanzaba entre risotadas y maldiciones varias afanandose por no caer en las malolientes aguas cambio repentinamente su expresion, levanto su cabeza mirando a sus compañeros con un raro rictus en su cara y detuvo su avance en seco , sus ojos y su boca muy abiertos parecian haber visto un espectro.
"jajajaja , venga sal de ahi y dejate de bromas...vayamos a comer un trozo de queso y pan...hoy no se ha dado bien la caza, amigo!!" sin embargo la inmovil figura del humano no daba un paso.Su cuerpo entonces empezo a temblar, sacudiendose con violencia, al ver esto el clerigo comenzo a conjurar unas protecciones simples, y tambien un hechizo de luz.
Leonard y Sab`rahn estaban ya en el campamento improvisado, uno limpiaba el pescado mientras el otro intentaba antorcha en mano divisar hacia donde se habian ido sus compañeros, los dos guerreros restantes le indicaban por donde habian alejado mientras bebian y contaban historias sobre tabernas y mujeres de dudosa reputacion, que hacian sonrojar al joven Leonard. En esto un grito los saco de su ensimismamiento y Sab`rahn pudo divisar el resplandor de los hechizos de Tantar.
Al llegar donde los tres hombres encontraran la charca pantanosa aun pudieron contemplar brevemente la figura de Jonás, envuelta por unos extraños seres de cuerpos viscosos semejantes a enormes serpientes, pero a diferencia de estas no se adivinaba cabeza alguna, sino que uno de sus extremos era una ancha cavidad redonda en la que descansaban innumerables filas de dientes afilados , del tamaño y aspecto de hojas de navajas y que penetraban armadura y cuerpo del desdichado con suma facilidad. Cada vez aparecian mas seres hasta que del cuerpo de Jonás apenas se entreveia una mano que se alzaba intentando en vano asirse a una salvacion imposible.
Sab´rahn comenzo entonces a recitar una plegaria, a la vez que movia las manos, los demas retrocedieron lentamente pues extrañas energias comenzaban a chisporrotear y danzar en torno al cuerpo del clerigo, una rara condensacion nubosa se formaba sobre aquel amasijo de carne ,sangre y viscosidades que tenia frente a el, al terminar su salmo alzo los brazos y un enorme rayo de fuego descendio de aquellas nubes golpeando a los seres que se abrasaban y chillaban mientras sus cuerpos explotaban impregnando a todos de un liquido verdoso y restos de su compañero.
-"La ira divina!!" penso Leonard para si mientras hacia esfuerzos para no vomitar y admiraba el majestuoso poder que desataba uno de los miembros de la congregacion a la que pronto seria servidor.
-"A los caballos!! nada mas podemos hacer aqui" ordenó el clerigo, su voz sonaba con cierto tono amargo, aunque no dirigio ni una mirada mas a la charca ni se lamentó ni comento en todo el camino acerca de la horrible muerte de uno de sus hombres, más parecia no haber existido nunca.
Leonard no se atrevio a decir ni una palabra sobre el incidente en los tres dias y dos noches que les llevaron a las puertas de Esmeltaran, pero observo que ninguno de los jinetes parecia albergar estima alguna por el guerrero fallecido, penso entonces que seguramente aquellos hombres habian visto perecer en batallas formidables a muchos de los suyos y estaban curtidos e insensibilizados ante una perdida mas. Comtempló esto como un don, brindado por la experiencia de la batalla, mas que como la crueldad que realmente representaba......
Cabalgaron sin descansar por dos dias, al tercero y ya al caer el sol se pararon proximos a un remanso del rio, con la intencion de refrescarse y pasar la noche,asi, montaron tiendas y buscaron algo de leña para hacer una fogata, Leonard saco su caña y abstraido en pensamientos sobre lo que habia dejado atras se separo del grupo, no demasiado, esperando lograr alguna pieza de buen tamaño que poder asar esa noche. El clerigo que habia hecho aquel ademan con la mano dias atras le acompañaba continuamente y le miraba con aires inquisitivos, mas era hombre de buena conversacion y a menudo Leonard le preguntaba sobre el monasterio, si habria mas chicos de su edad...y el tipo de cosas que preocupan a un joven de unos 15 años, el clerigo le respondia con una expresion de sabiduria astuta y media sonrisa pues la inocencia de aquel educado pueblerino hijo de comerciante les proporcionaria un tranquilo trayecto sin demasiadas explicaciones.
Dos de los guardias y el otro clerigo que les escoltaban en su viaje exploraban los alrededores en busca de algo de caza entretanto, siguiendo las huellas de patas y hocicos de jabalis que a la noche merodeaban la rivera en busca de invertebrados y frutos enterrados en el fango dieron con una apartada cienaga, advirtiendo que las huellas de los animales que ansiaban cazar desparecian en pos de unas marcas que indicaban que algo pesado habia sido arrastrado hacia aquel cenagal de aguas verdosas y sobre el que una densa neblina solo dejaba adivinar aqui y alla los tallos sobresaliantes de algunos juncos. Algo confundidos los tres se miraban encogiendose de hombros, uno de los guerreros avanzó hacha en mano, sumergiendo sus botas casi hasta la rodilla en aquellas aguas y mirando precavido alrededor. nada vivo parecia habitar aquella cienaga.
El corpulento guerrero dio media vuelta avanzando hacia sus compañeros de viaje que reian al ver las dificultades que tenia para avanzar entre el barro , pues sus botas debido al peso de su armadura se clavaban en el, haciendo costoso el avance.
-"Vamos Jonas, que es para hoy!!" grito uno de los apostados en la orilla.
La oscuridad de la noche comenzaba a hacerse dueña de la tarde, y el humano que avanzaba entre risotadas y maldiciones varias afanandose por no caer en las malolientes aguas cambio repentinamente su expresion, levanto su cabeza mirando a sus compañeros con un raro rictus en su cara y detuvo su avance en seco , sus ojos y su boca muy abiertos parecian haber visto un espectro.
"jajajaja , venga sal de ahi y dejate de bromas...vayamos a comer un trozo de queso y pan...hoy no se ha dado bien la caza, amigo!!" sin embargo la inmovil figura del humano no daba un paso.Su cuerpo entonces empezo a temblar, sacudiendose con violencia, al ver esto el clerigo comenzo a conjurar unas protecciones simples, y tambien un hechizo de luz.
Leonard y Sab`rahn estaban ya en el campamento improvisado, uno limpiaba el pescado mientras el otro intentaba antorcha en mano divisar hacia donde se habian ido sus compañeros, los dos guerreros restantes le indicaban por donde habian alejado mientras bebian y contaban historias sobre tabernas y mujeres de dudosa reputacion, que hacian sonrojar al joven Leonard. En esto un grito los saco de su ensimismamiento y Sab`rahn pudo divisar el resplandor de los hechizos de Tantar.
Al llegar donde los tres hombres encontraran la charca pantanosa aun pudieron contemplar brevemente la figura de Jonás, envuelta por unos extraños seres de cuerpos viscosos semejantes a enormes serpientes, pero a diferencia de estas no se adivinaba cabeza alguna, sino que uno de sus extremos era una ancha cavidad redonda en la que descansaban innumerables filas de dientes afilados , del tamaño y aspecto de hojas de navajas y que penetraban armadura y cuerpo del desdichado con suma facilidad. Cada vez aparecian mas seres hasta que del cuerpo de Jonás apenas se entreveia una mano que se alzaba intentando en vano asirse a una salvacion imposible.
Sab´rahn comenzo entonces a recitar una plegaria, a la vez que movia las manos, los demas retrocedieron lentamente pues extrañas energias comenzaban a chisporrotear y danzar en torno al cuerpo del clerigo, una rara condensacion nubosa se formaba sobre aquel amasijo de carne ,sangre y viscosidades que tenia frente a el, al terminar su salmo alzo los brazos y un enorme rayo de fuego descendio de aquellas nubes golpeando a los seres que se abrasaban y chillaban mientras sus cuerpos explotaban impregnando a todos de un liquido verdoso y restos de su compañero.
-"La ira divina!!" penso Leonard para si mientras hacia esfuerzos para no vomitar y admiraba el majestuoso poder que desataba uno de los miembros de la congregacion a la que pronto seria servidor.
-"A los caballos!! nada mas podemos hacer aqui" ordenó el clerigo, su voz sonaba con cierto tono amargo, aunque no dirigio ni una mirada mas a la charca ni se lamentó ni comento en todo el camino acerca de la horrible muerte de uno de sus hombres, más parecia no haber existido nunca.
Leonard no se atrevio a decir ni una palabra sobre el incidente en los tres dias y dos noches que les llevaron a las puertas de Esmeltaran, pero observo que ninguno de los jinetes parecia albergar estima alguna por el guerrero fallecido, penso entonces que seguramente aquellos hombres habian visto perecer en batallas formidables a muchos de los suyos y estaban curtidos e insensibilizados ante una perdida mas. Comtempló esto como un don, brindado por la experiencia de la batalla, mas que como la crueldad que realmente representaba......
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Leonard
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LordBassilus
