Dimisión

[Leonard]

Amanece un dia soleado sobre Nevesmortas, la helada de la noche sobre la hierba se convierte en brillantes lagrimas que resplandecen al contacto de los primeros rayos del alba.
Los mismos rayos se cuelan por la ventana de la habitación de Nymiel y Leonard un dia mas comienza y como cada mañana al despertarse y tras unas oraciones, un beso en la frente y una mirada triste a su amada y a su bebé. Los arropa a ambos esperando un dia mas que ella vuelva a ser la de antes, su atencion y simpatia, su amor y sus atenciones, su personalidad y su alma la habian abandonado. "¿Y donde estaba yo?" se pregunta mientras se viste, "Cumpliendo con mi deber seguramente" se responde,"¿No es mi deber proteger y cuidar a los que mas amo?" Se dirige a la puerta con la sensación de que sus obligaciones como guardia y para el pueblo le han alejado de esta premisa, un pueblo al que a jurado defender pero que continuamente muestra un terrible desagrado hacia la labor de los guardias.
"Todo este esfuerzo para eso, tanta dedicación para ver a mi famila en este estado..."

Se dirige al cuartel con paso firme, ya ha tomado una decisión. Al llegar le recibe como de costumbre su capitán, que le recibe con un saludo y le menciona que hay mucho trabajo , despues de lo acontecido en los dias anteriores....los asaltos, las intrusiones, los asesinatos de guardias....
Algo en su rostro debia reflejar lo que sentía, pues enseguida su capitán observó un extraño desanimo en su expresión

-"¿Os sucede algo, mi buen Leonard?"
-"A decir verdad si mi capitan, ¿puedo sentarme un momento?"
-"Claro...."
Tras una breve pausa y respirar tranquila y profundamente un par de veces Leonard continuó:

-"Vereis capitán, hoy vengo a presentaros mi dimisión... ya son suficientes guardias en la villa, yo tengo otras obligaciones y atenciones. He descuidado mi dedicación a la Atalaya y lo mas importante, a mi familia.
Aquellos a los que juré proteger no parecen contentos con el proceder del cuerpo al que represento, se oyen muchas protestas cada dia, rumores y comentarios en contra nuestra. Esto hace aun mas decepcionante mi labor y temo que con esa decepción llegue el desinterés, la desgana, y sinceramente señor en esas condiciones dudo que pueda desempeñar mi trabajo de manera que pueda yo considerar digna. Sé que por interés propio hay quien desea difundir estos rumores, lo veo cada dia con respecto a LA Orden de Caballeros, siempre hay quien intenta desprestigiarlos, aun cuando se juegan la vida por su seguridad...pero mis animos estan seriamente mellados...y..mi mujer señor...ya sabeis *su rostro se torna extremadamente triste*, y el pequeño Uthien, apenas lo he visto crecer. Creo que Kelennela la niñera le ha visto salir mas dientes que yo."

Finalmente apesadumbrado Leonard se levanta mantiene la mirada fija en Mannock, sin esperar respuesta alguna le tiende la mano.

-"Un placer señor, haber servido bajo vuestras ordenes y haberos conocido, y un honor para mi haber formado parte de la guardia durante este tiempo, por favor ...comprendedme"