La Marca Argéntea

El cielo estaba despejado, y el sol tostaba a los pocos afortunados guardianes de las puertas del castillo. Ender miro a ambos y no pudo más que sentirse alegre por no haber tomado el camino de la guerra y haberse armado como caballero según la tradición de su familia. Pero la alegría le duro poco cuando se adentro en cerrado y gris lugar llamado la fortaleza de los Vorkosigan.

Ender, tercer hijo de la familia Vorkosigan, quinta en importancia en Amn, era sin duda un tipo libre mas preocupado por el saber la música y la aventura (por ese orden) que por la guerras de Amn o de ser digno para su familia. Sin duda era la lacra de los Vorkosigan.

Ese día como tantos otros tenía una entrevista con su padre, el gran Vorkosigan, un héroe de épocas pasadas, en opinión de Ender, lo único que logro es matar mas gente que sus casi indefensos opositores. Pero la historia se rediría a su progenitor como el liberador de Tempus, y el que castigo a los malvados que se oponían a Amn. La verdad, y bien lo sabia su tercer hijo, es que ataco y invadió tres pueblos anexionándolos a las tierras paras las que el luchaba.

Las horas pasaron mas largas que nunca, y una vez mas, su padre lo había amenazado con unirlo al clero de tempus a la fuerza, de obligarlo a investirse como caballero, al igual que sus dos hermanos mayores, o como mínimo, a dejar esas molestas influencias en las orden bardicas que tanto frecuentaba. Esa charla se repetía mucho, y siempre de malas maneras. Ender Vorkosigan, tercer hijo del gran Vorkosigan, y lacra de su familia estaba harto de esta situación, soñaba con irse muy lejos como bardo, vivir y contar aventuras, narrar y decir odas, vivir como a él le gustaría.

Pero en toda historia hay amores, y el de nuestro protagonista era Marianne, dama de noble cuna pero de familia caída en desgracia. Su padre jamás aprobaría su relación, así que se veían siempre en el mas absoluto secreto, ella era la razón por la cuan no había huido de Amn.

Los meses fueron repetitivos, frustrantes, educativos solo hasta cierto límite. Pero llego un día que lo cambio todo, los ogros atacaron como nunca en todo el reino de Amn, y los hermanos de Ender junto con su padre tomaron armas y protegieron, esta vez si, como héroes a Amn. Ender fue también llamado a combatir, pero el no fue, no tenia ni idea de lucha, no tenia entrenamiento ni preparación, pero si tenia una dama que proteger, y esas largas semanas de guerra y crisis, con ella las pasó.

Todo término, de manera no sabría decir si rápida o lenta, supongo que eso depende del punto de vista, pero los ogros fueron rechazados. La guerra se llevo muchas vidas, entre ellas, los dos hermanos de Ender, su padre no podía creer que su único heredero, fuera el mas indigno y cobarde de sus hijos, y en cuanto descubrió los motivos de su hijo para no ir a la guerra, y con quien paso ese tiempo. Entro en locura.

Hace ya mas de cuatro años de esos sucesos, y Ender lleva viajando por los reinos siguiendo su camino como bardo, desheredado por petición, y huido sin aviso. Y no pudo hacer otra cosa, pues tras que Mariane muriese en circunstancias sospechosas, su mundo era otro, su vida había empezado de cero, y ahora. Era Ender a secas, nada de Vorkosigan.