Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bonos de rol)

Los trovadores de la región narran la historia de sus héroes. (Historias escritas por los jugadores)

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Gwail

Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bono de r

Mensaje por Gwail »

¿Es que sólo hay objetos para malignos,bardos o paladines?Los guerreros que usan hachas qué,eh?los olvidados! ¬¬




Evitad Offtopiquear temas.
Hay armas de guerreros, como las Gemelas Carmesi, e items de otras clases en este mismo hilo.
Todo es tener bonos y ganas de crear una historia para el arma.
Talos
Torzai

Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bono de r

Mensaje por Torzai »

Susurro de la canción naciente.


Los caminos de la magia en Faerûm son desconcertantes. Cuándo algún arcano cree saberlo todo siempre aparece algun efecto nuevo, algun conjuro nuevo o algun cambio que hace que el camino del conocimiento sea interminable. La magia es algo tan amplio y tiene tantos secretos que solo la misma Dama de los Misterios podría afirmar conocerlos todos. Uno de esos cambios insospechados es de lo que os contaré a continuacion.

En la Marca Argentea, más concretamente en los paramos helados del bosque frío se dió lugar algo sorprendente. Aquella noche, andava por allí envuelto en un grueso capote un conocido trovador muy aficionado al riesgo y la aventura. Cansado del viaje decidió montar un pequeño campamento, donde pasar la noche y descansar hasta el día siguiente. Inconsciente de los peligros que acechan por ese gélido lugar.

Pasaron las horas, incansables, el viento arremetia furioso contra los telajes de la tienda y el suelo congelado no dejaba descansar al experimentado trovador. Pero eso, no era lo peor. En mitad de la noche, el bardo empezó a oir unos leves pasos que chapoteaban en la nieve, tenían una marcha bastante rápida y iban en su dirección. ¿Qué hago? Se preguntaba mientras revisaba entre sus objetos mágicos. Claramente el protagonista no podría con todos. Al poco su oido se agudizó un poco más, pudo distinguir los pasos de unas 6 personas, todas ellas armadas hasta los dientes. Salió presto de su tienda y desenvainó su arma, recito algunos canticos de viejos conjuros y su mirada se hizo firme, la piel se veia recubierta por una leve aura fantasmal, la hoja de su arma se recubrió de llamas, a la par que mejoraba enormemente la calidad del mismo. Otro aura, esta mucho mas intensa abarcó está vez un area mucho mas amplia centrada en el trovador. Y por fin, los vió.

Allí estaban ellos, 6 hombres inmensos cargaban contra él trovador. Sus miradas estaban bañadas en el fuego de la ira, sus pasos resonaban por el gélido valle en el que se encontraban, sus gritos podrian hacer estremecer al mas valiente de los hombres. El trovador dudó un instante... Solo uno. Sacudió la cabeza y un verso empezó a nacer de sus labios. A medida que avanzaba el mismo, la firmeza de cada acto que hacia tenia la seguridad de los mas grandes heroes, sus manos empuñaban fuertes el acero, sus pies pisaban con determinación el paisaje y en ese mismo instante, pudo ver un leve brillo en su armadura, que parecía reaccionar a los canticos del bardo. Una leve melodía nacia de la misma, una melodia que ya habia tocado miles de veces en miles de ocasiones distintas y que reforzaron las palabras del trovador. Era una cancion muy tenue, muy muy sutil, pero ahi estaba dandole todo su apoyo.


El trovador alzo la mirada hacia los barbaros y las viejas heridas de los mismos empezaron a hacerse visibles, sangrando considerablemente. Cada paso que daban estaban inundados de una torpeza que lo unico que hizo fue hacer aflorar una sonrisa triunfal al trovador. Pronto los barbaros entraron dentro de la pequeña aura y empezaron a gritar, se hacian mas tropes a cada momento que pasaba, sus fuerzas les abandonaban rendidas ante el poderoso sortilegio. Sus heridas les hacian fallar, los sonidos que rodeaban al trovador cada vez eran mas fuertes y molestos, les sangraban los oidos, la distorsionada imagen del bardo complicaba aún más si cabe la situacion y uno a uno, todos esos hijos de la furia tiñieron la nieve de rojo. Todos y cada uno vieron su final en la fría estepa.

Cuando todo terminó, el silencio se apodero del lugar. El verso se detuvo y con él la tenue melodia que nacia de su armadura. Los hechizos se fueron disipando poco a poco y aquel bardo clavo una rodilla en el suelo, cansando. Lo cierto es que uno de esos barbaros habia conseguido asestarle un golpe y la herida sangraba considerablemente. Inundado por la sensatez que proporciona el dolor, tomo su sombrero y lo sacudió levemente. "A casa, mi viejo amigo. Tymora ya me hizo encontrar lo que he venido a buscar". Una luz inundó el lugar y el bardo se desvaneció, dejando aquel lugar en un eterno silencio.

Y así fue mi querido oyente, *Deshizo en un gesto cariñoso el pelo del niño y le mostró una tierna sonrisa* como ese trovador escuchó el impulso que creyó que Tymora le habia brindado y como la Dama Sonriente, le premió con ello. Ahora, si me disculpas me iré a descansar. Tymora te sonria.*Y tras ello, el cuentacuentos inició la marcha al hospicio acompañado de leves quejidos de dolor a cada paso que daba.*



Características del objeto
Nombre: Susurro de la canción naciente.
Objeto base: Armadura Acolchada
Bonificador de mejora +3
Acelerar
+5 Interpretar

Coste: 1000 Bonos y armadura ligereza.
Ark Roywind
Jabalí Terrible
Jabalí Terrible
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Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bono de r

Mensaje por Ark Roywind »

SANGRE DE NEBRUG


Imagen

Características del objeto: Furia de bárbaro 1 uso/día.

Objeto base: Cantimplora.

Coste: 500 Bonos.


Se trata de una mezcla de plantas y hongos usadas para crear una bebida fermentada de sabor y aroma fuerte. Dicho brebaje es preparado por los chamanes de algunas tribus orcas y dada a guerreros enfermos o incapacitados para que ignoren aquello que les aqueja y corran al campo de batalla a continuar luchando. En los orcos la bebida tiene un efecto revitalizante, que los vuelve indiferentes al dolor y les permite llevar su cuerpo más allá de sus propios límites.
Algunos guerreros de la horda la beben en grandes cantidades, lo que les hace enloquecer y entrar en un trance violento y sanguinario que los convierte en auténticos demonios que siempre la muerte el caos durante la batalla, atacando incluso a los suyos durante el violento éxtasis que los domina.

En los humanos esta bebida tiene un efecto enajenador en pequeñas dosis, que puede ser tóxico e incluso inducir al coma, o causar la muerte, en dosis mayores, sobre todo en aquellos de constitución débil. La ingesta en hombres y mujeres humanos altera la percepción de la realidad y la conducta, llevando a una sensación de ingravidez junto a un estado de furia y violencia. Afecta a las conexiones nerviosas haciendo que se ignore el dolor, lo que lleva a un estado de temeridad e ignorancia de la propia integridad física, y permite forzar el cuerpo y los músculos contra sus limitaciones naturales, lo que otorga la capacidad de realizar proezas de fuerza y resistencia que difícilmente se lograrían antes. Nubla la mente hasta el punto de hacer muy resistente a estados enajenadores y cualquier tipo de persuasión o intimidación.
Desgraciadamente también provoca un estado de histeria que suele estar acompañado de risas y gritos, además de la posible indistinción entre aliados y enemigos.

Los efectos pueden durar horas, dependiendo de la dosis tomada, tras las que, en el caso de los humanos, vienen horribles efectos secundarios. El más evidente es un terrible dolor de cabeza que recuerda a una resaca de grandes dimensiones, que dificulta enormemente la concentración hacia la más pequeña de las tareas. Este efecto es duradero pero termina por desaparecer con reposo e hidratación. Sin embargo, el forzar el cuerpo contra sus limitaciones pasa una gran factura, y puede hacer que simplemente moverse se convierta en un suplicio.
Lothar, tuerto alcohólico con una espada grande
Sannish, dramático artesano del infortunio
Agh, ...
Zun0
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Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bono de r

Mensaje por Zun0 »

CINTURÓN DE AKHILLEYS



La historia de cómo conseguí el preciado broche que hay en mi cinturón.

Un día iba paseando tranquilamente para ir a buscar gemas en el pozo, cuando de repente,escuché gritos que venían de lo más profundo de la cueva de los bandidos.

No tenía nada que hacer ese día, salvo pillar un par de gemas para luego tallarlas y hacer tratos con el archimago Eves (la verdad que nos viene bien a los dos este pequeño negocio que tenemos entre manos).
Pues eso, que como no tenía nada para hacer que no se pudiese hacer otro día, me acerqué para ver que pasaba y así intentar rascar algo de esa situación.

Los bandidos habían atracado un carruaje y habían secuestrando a los integrantes. ¿Que cómo lo sé? pues porque vi a un par de ellos tirando del caballo para meterlo dentro de la cueva, a los dueños del carruaje no los veía pero sí que les escuchaba gritar como locos desde fuera.

Me escondí lo mejor que pude para acercarme y observar la situación, cosa fácil de hacer ya que soy de lo más sigiloso que existe por estas tierras.

A los dos bandidos que había fuera no tuve ni que acercarme, con unas simples flechas en sus cabezas bastó para abatirlos. Una vez despejada la entrada, caminé hacia la cueva para contemplar mejor la escena del crimen.

Para mi facilidad, es una cueva, poca luz, mucha oscuridad....no sé si lo vas pillando, por si no te ha quedado claro, no hay mejor sitio para reírme de esos pobres bandidos.

Me escondí y camine lentamente hacia los gritos de esa pobre familia. Los tenían encerrados en su mazmorra.

Observé al jefe dando órdenes para poner un guardia en la entrada de la celda y el grupo mas diverso se fue hacia el final de la cueva, el guardia
de la celda fue el primero en caer, bandido fácil de abatir.

Antes de abrir la celda continué para acabar con todos ellos y así poder hablar tranquilamente con los prisioneros.

El último grupo era más amplio y variado en cuanto habilidades se refiere, creo recordar que había un mago con una túnica extraña, un semiorco bastante fuerte, dos o tres intentos de bandidos y el jefe que daba las órdenes.

Antes de actuar, coloqué un par de trampas en la única salida que tenían por si la cosa se ponía fea y preparé un pergamino que convertiría todo en la más absoluta oscuridad si tuviese algún problema.

Al ver al mago despistado, escalé por una cornisa de piedra y le caí en la cabeza, clavándole mi espada en toda la nuca.

Acto seguido pensé en esconderme y lo hice lo mejor que podía, caminando entre las sombras como solía llamar a ese movimiento ya que otras veces me había funcionado.

Hace ya mucho tiempo que aprendí ese increíble truco, una vez incluso había tonteado con el plano de las sombras, pero nunca lo había tocado realmente, sólo había logrado llegar hasta una delgada y fina capa que existía entre el plano material y el de las sombras.

Aparecí detrás del semiorco y le corté la yugular delante del resto, les miré, me reí y volví a hacer exactamente lo mismo, burlarme de su vista y coquetear con dicho plano.

¡Cómo lloraban! Creo recordar escuchar que si "seguro que son 3 o 4", que no entienden "qué está pasando", que si "encender las luces porque seguro que así los vemos",etc,etc, lloriqueos varios y típicos de humanos simples.

Conseguí abatir al resto del mismo modo hasta llegar al líder, el cual murió de la misma forma, sin tener ni idea de qué había pasado.

Una vez limpia la cueva, me fui al calabozo para interrogar a la familia.

Les abrí la cerradura y les saludé.

-"Buenos días", les saludé felizmente. Me miraron totalmente asustados y les dije que no pasaba nada, que les acababa de salvar la vida.
-"¿Por qué sois tan importantes para ellos?" Me dijeron que eran unos importantes comerciantes de Aguas Profundas.

Acto seguido les dije que esperaba un reconocimiento entre los mercaderes, siempre hay que aprovechar cualquier situación.
Se miraron y me ofrecieron el broche de su casa, por lo visto es un broche bastante preciado, ya que todos los comerciantes lo conocen y
siempre les rebajan los precios en los trueques y compras que hacen entre ellos.

Sin más miramientos, acepte el broche y me aparté de la puerta de la celda para dejarles salir.

Me giré y me fui igual que había llegado, caminando tranquilamente en dirección al pozo a por esas gemas que necesitaba tallar.

Pues eso, no se cómo esos bandidos sabían que día iban a pasar, quizás fue una simple coincidencia o también puede ser que en la villa exista algún espía que contacta con esos bandidos.
Tendré que indagar en el asunto y si ese espía existe, quien sabe, quizás contratarlo en un futuro.





Cinturón de Akhilleys

Tras la ayuda recibida por parte de
Akhilleys a unos mercaderes de renombre,le
fue otorgado un broche que todos los
mercaderes reconocerán al verlo.
Gracias a este broche, se le considera un
mercader y obtiene precios más
asequibles que el resto de la gente.
Dicho broche está colocado en la hebilla de
su cinturón.

Objeto base: Cinturón
Peso: 1.0

Propiedades especiales:
Bonif. de habilidad: Tasación 5
Bonificador de mejora: Destreza 5
Libertad

Precio:
Bonos de rol: 1000
Cinturón de agilidad +5
c4nel4
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Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bono de r

Mensaje por c4nel4 »

Piir tel´Penaal (El Tesoro del Bardo)


La luna era ya visible en el cielo mientras el bardo trabajaba en perfeccionar sus arcos, bien es sabido que Corellon anima a todos los elfos a crear objetos de bella manufactura pues estos son en gran parte los valores élficos que quiere para sus hijos.

Así Lucian había trabajado su maestría en la madera durante muchas, muchas dekhanas de la mano de su fiel leñador, un joven aasimar llamado Amian Fieldwhite, juntos habían alcanzado las cotas más altas en esta artesanía y el arco que estaba terminando en aquel mismo instante parecía tocado de la mano divina.

Soplo el serrín que había dejado la suave madera tras limarla a mano con mimo, y observo el precioso arco, sus curvas eran dignas de la mejor sacerdotisa de Sune y su acabado, perfecto.

Lucian llevaba mucho tiempo que haría cuando consiguiera un arco de tal calidad, y puso rumbo a Adbar, donde Wálax y el resto de exploradoras defensoras del bosque asintieron ante el joven bardo que las había ayudado a defender su bosque en numerosas ocasiones, el arco sería bendecido por los elfos del bosque, y por la gracia de Sehanine Lunarco, y protegerían a Lucian de cualquier temor para sus futuras empresas.

Todas las flechas disparadas por este arco son las llamadas "Silbídos de Lucian" y provocan cierto daño en sus enemigos imbuidas por el poderoso cancionero del Bardo que ha seguido los pasos del Arquero Arcano, gracias a su maestro Riavan Busmani.



Objeto base: Arco largo compuesto de Maderadique +5 (engarzado)

Propiedades especiales:

Bonificador de ataque 5
Bonificador de habilidad: Avistar 5
Bonificador de mejora: Destreza 2
Bonificador de mejora: Fuerza 2
Al impactar 1d4 Sónico
Inmunidad: Miedo.
Reforzado 5
Sólo puede usarlo: elfo

Precio: 2500
Arco Engarzado +5 de Maderadique
Krönn Forjardiente, enano escudo
Lucian Siannodel, elfo lunar
Kalen, elfo solar
Daa, da
Ark Roywind
Jabalí Terrible
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Re: Objetos legendarios de la Marca Argéntea. (Los bonos de

Mensaje por Ark Roywind »

CANTO DEL CISNE



Imagen



Objeto Base: Reforja de Trente.

Propiedades especiales: Espadón +4 artesanal con doble engarce: daño sónico y afiladura. Efecto visual "filo rojo".

Precio: 1500 bonos y Reforja de Trente

Descripción del Arma:

Se puede ver la firma artesanal de Trente grabada en el arma.

Forjada con parte del alma de Lothar por manos de Iren, la hoja del espadón parece vibrar, sedienta de emociones y dolor. Si uno se acerca lo suficiente puede ver cosas que desearía haber olvidado en su reflejo escarlata, puede escuchar susurros y lamentos provenir de su interior, e incluso reconocer voces familiares entre sus quejidos que despiertan viejos y oscuros recuerdos. Su sonido en mitad de la batalla puede resultar desolador, un cántico triste y fúnebre, afectando física y mentalmente a quienes lo escuchan.
En manos de Lothar, el filo del arma está envuelto por un extraño destello carmesí que a veces se torna negro. Un resplandor que se intensifica al entrar en combate, tomando el color de la sangre cuando el arma atrapa las emociones nacidas de la batalla, alimentándose de la rabia y el miedo de Lothar y sus adversarios. Su brillo se oscurece e intensifica cuando la hoja arranca una vida, transmitiendo la pérdida y el dolor a aquel para quién fue forjada y haciéndolo parte de él.
Lothar, tuerto alcohólico con una espada grande
Sannish, dramático artesano del infortunio
Agh, ...
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