//¡Buenas! Mini-quest a escenas sueltas de presentación al servidor. Para ir practicando, a ver que tal se nos da. ¡Veamos que tal escribís!
¡Ah! Sólo cabían dos barras en este post, y ya las he gastado... ¡ni una más por favor!
La noche del cazador
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Malar
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La noche del cazador
La Bestia (parda)
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Dae
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-La historia según Daedelath:
"Lo que estoy a punto de narrar es no más que un juego de imagenes borrosas en mi mente, algunas más que otras. Esa noche me sentí fuera de mi mismo, pero creo que mejor inicio desde el principio.
Todo inició cuando decidí ir hasta Adbar por una capa nueva, despues de todo la mía está algo curtida... Y ahora hecha añicos.
Recién me bajaba del coche de la carabana, cuando escuché unos pasos ligeros a través de la nieve. Nada de que preocuparme fue lo que pensé apenas ví al joven mago Merlinius. Cuan equivocado estaba...
Estaba a punto de saludarle, como es esa costumbre tán molesta de los habitantes de esta zona, saludar hasta su sombra. En fin, estaba a punto de saludarle cuando lo noté por primera vez. Una bruma roja, niebla como la que nunca antes había visto.
No recuerdo exactamente como sucedió o en que orden, pero de entre la niebla escuché dos cosas: La primera fueron esas palabras que nunca olvidaré. Las palabras de un hombre despavorido antes de salir huyendo: "Se acerca la noche del cazador". Seguido de esto, el cochero salió huyendo como quien huye del mismísimo demonio. Tambien recuerdo Ver una forma gigantesca aparecerse de entre las sombras blancas de la niebla, pronto noté de quien se trataba: Erik Hachasangrienta, el líder del clan del Colmillo Sangriento y un aliado personal. El gigante se irguió frente a mí, no antes de tomar una siesta en su tienda (A veces juro que ese bárbaro tiene tánto músculo que no puede usar la cabeza), para finalmente notar que algo se encontraba fuera de lugar...
Naturalmente discutimos, pensando que era una broma arcana por parte de Merl, él negandose a tomar responsabilidad del asunto.
De un momento a otro el arcano comenzó a retroceder, alejarse de mí de una manera frenética, había miedo en sus ojos.
Parte de su acto pensé. Eso debe ser ...
Recuerdo a Erik culpando a Merlinius, Merl mirandome de esa peculiar manera y respondiendole a Erik jurando inocencia, mientras que la niebla jugaba trucos con mis ojos. ¡No me tocaba! La niebla ni siquiera se dignaba a acariciarme la piel. Me movía y parecía que la niebla había tomado vida y bailaba a mi compás, burlandose de mí.
Luego de repente... aullidos... Aullidos provenientes del sur. Debo admitirlo, mi orgullo me estaba haciendo una mala jugada, lo único que podía pensar era: Soy un cazador, NO una presa!. Mi ego, tomando control de mí y haciendo a un lado mi sentido común me obligó a hacer lo que hice.
Sí, salimos a cazar al cazador en su noche. Seguiamos a algo a lo que no comprendíamos, cada uno con su motivo, el mío el más estúpido de todos quizá. Cazar al cazador
Maya, mi fiel compañera y única amiga, nos acompañó, señalando siempre inquieta hacia el sur, hasta que esos gnolls la lastimaron de manera que tuvo que regresar con su jauría, pero yo seguí. Acompañado de un arcano desquiciado y un bárbaro frenético con una sola meta:Cazar al cazador
Fue sencillo al principio, revisamos el fuerte gnoll más cercano, sin encontrar rastros. Por consejo de Erik seguimos el camino, hacia el Tramo de Adbar, a revisar su fuerte principal. ¿Como iba a saber que una fuerza más allá de mi entendimiento estaba tomando control de mi ser sin que yo mismo lo notara?
Entonces lo ví, lo ví y no lo creí: Panteras
-Dae se aleja, mirando a alguno de sus compañeros en esta aventura, para que siga la historia.
"Lo que estoy a punto de narrar es no más que un juego de imagenes borrosas en mi mente, algunas más que otras. Esa noche me sentí fuera de mi mismo, pero creo que mejor inicio desde el principio.
Todo inició cuando decidí ir hasta Adbar por una capa nueva, despues de todo la mía está algo curtida... Y ahora hecha añicos.
Recién me bajaba del coche de la carabana, cuando escuché unos pasos ligeros a través de la nieve. Nada de que preocuparme fue lo que pensé apenas ví al joven mago Merlinius. Cuan equivocado estaba...
Estaba a punto de saludarle, como es esa costumbre tán molesta de los habitantes de esta zona, saludar hasta su sombra. En fin, estaba a punto de saludarle cuando lo noté por primera vez. Una bruma roja, niebla como la que nunca antes había visto.
No recuerdo exactamente como sucedió o en que orden, pero de entre la niebla escuché dos cosas: La primera fueron esas palabras que nunca olvidaré. Las palabras de un hombre despavorido antes de salir huyendo: "Se acerca la noche del cazador". Seguido de esto, el cochero salió huyendo como quien huye del mismísimo demonio. Tambien recuerdo Ver una forma gigantesca aparecerse de entre las sombras blancas de la niebla, pronto noté de quien se trataba: Erik Hachasangrienta, el líder del clan del Colmillo Sangriento y un aliado personal. El gigante se irguió frente a mí, no antes de tomar una siesta en su tienda (A veces juro que ese bárbaro tiene tánto músculo que no puede usar la cabeza), para finalmente notar que algo se encontraba fuera de lugar...
Naturalmente discutimos, pensando que era una broma arcana por parte de Merl, él negandose a tomar responsabilidad del asunto.
De un momento a otro el arcano comenzó a retroceder, alejarse de mí de una manera frenética, había miedo en sus ojos.
Parte de su acto pensé. Eso debe ser ...
Recuerdo a Erik culpando a Merlinius, Merl mirandome de esa peculiar manera y respondiendole a Erik jurando inocencia, mientras que la niebla jugaba trucos con mis ojos. ¡No me tocaba! La niebla ni siquiera se dignaba a acariciarme la piel. Me movía y parecía que la niebla había tomado vida y bailaba a mi compás, burlandose de mí.
Luego de repente... aullidos... Aullidos provenientes del sur. Debo admitirlo, mi orgullo me estaba haciendo una mala jugada, lo único que podía pensar era: Soy un cazador, NO una presa!. Mi ego, tomando control de mí y haciendo a un lado mi sentido común me obligó a hacer lo que hice.
Sí, salimos a cazar al cazador en su noche. Seguiamos a algo a lo que no comprendíamos, cada uno con su motivo, el mío el más estúpido de todos quizá. Cazar al cazador
Maya, mi fiel compañera y única amiga, nos acompañó, señalando siempre inquieta hacia el sur, hasta que esos gnolls la lastimaron de manera que tuvo que regresar con su jauría, pero yo seguí. Acompañado de un arcano desquiciado y un bárbaro frenético con una sola meta:Cazar al cazador
Fue sencillo al principio, revisamos el fuerte gnoll más cercano, sin encontrar rastros. Por consejo de Erik seguimos el camino, hacia el Tramo de Adbar, a revisar su fuerte principal. ¿Como iba a saber que una fuerza más allá de mi entendimiento estaba tomando control de mi ser sin que yo mismo lo notara?
Entonces lo ví, lo ví y no lo creí: Panteras
-Dae se aleja, mirando a alguno de sus compañeros en esta aventura, para que siga la historia.
Última edición por Dae el Vie Feb 06, 2009 3:23 am, editado 1 vez en total.
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Lerdopatan
- Mas pesado que Rusillo con los Tejones.
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Khay despertó en la atalaya, y no dio crédito a lo que vio a su alrededor. Un campamento montado en pleno templo, Dick refugiado, y sin beber. Los mendigos sentados en unos improvisados bancos, y Ashnar pendiente de todo.
Al salir fuera todo parecía normal. Muy mojado, pero normal. Se encaminó en busca de Ving, al norte, cuando al llegar a los alrededores del bosque vio una niebla roja y densa, casi como un humo asfixiante. Allí no había rastro de gente: ni Trente, ni el carpintero. Sólo los animales solos y tranquilos. Extrañado siguió bosque adentro, y allí se encontró con un numeroso grupo. Muchos conocidos, y pocos desconocidos. Erik, Radha, Gorm, Kirath, Alud, Derum, Vanna... y muchos otros estaban allí hablando nerviosos de panteras y osgos, de lluvias y tormentas; y en ese momento, al llegar, Radha le envió con cuatro o cinco de ellos a patrullar la zona. Multitud de extrañas panteras poblaban el bosque, y además aparecieron unos enormes gatos alados, las mantícoras.
//dejo que siga otro la historia, y que complementen el principio, que de eso no me he enterado.
Al salir fuera todo parecía normal. Muy mojado, pero normal. Se encaminó en busca de Ving, al norte, cuando al llegar a los alrededores del bosque vio una niebla roja y densa, casi como un humo asfixiante. Allí no había rastro de gente: ni Trente, ni el carpintero. Sólo los animales solos y tranquilos. Extrañado siguió bosque adentro, y allí se encontró con un numeroso grupo. Muchos conocidos, y pocos desconocidos. Erik, Radha, Gorm, Kirath, Alud, Derum, Vanna... y muchos otros estaban allí hablando nerviosos de panteras y osgos, de lluvias y tormentas; y en ese momento, al llegar, Radha le envió con cuatro o cinco de ellos a patrullar la zona. Multitud de extrañas panteras poblaban el bosque, y además aparecieron unos enormes gatos alados, las mantícoras.
//dejo que siga otro la historia, y que complementen el principio, que de eso no me he enterado.
Última edición por Lerdopatan el Vie Feb 06, 2009 8:55 am, editado 1 vez en total.
Khay, paladín de Tyr
- Tuii, puñetero de profesión Conjuros de Tuii -¡click! 
Lerdo y patán. De toda la vida...
- Gusiluz rules -
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hitman007
Merlinius
Un día típico sin nada que hacer, viajando por la marca sin rumbo, a donde mis pies me llevaran.
Llegue a adbar interesado en las cervezas pero sin ganas de beber. decidí seguir viajando. A la salida me encontré con astinus, saludarlo como siempre y esperando su mala cara como es frecuente. Antes de despedirme apareció esa bruma roja y ambiente extraño. Cambiamos vistas buscando respuestas en la cara de ambos pero no entendíamos nada, acto seguido el cochero se fue muerto del miedo diciendo que era el día del cazador.
Erik llego con su falta de educación siempre presente pensando que el cambio de ambiente era obra miá ya casi a punto de usar su arma contra mi persona. Por un momento pensé que retendría defenderme, por suerte, el posible causante de los cambios o sus seguidores emitían ruidos de lejos de las montañas por lo cual decidimos ir en busca de la fuente.
Visitamos varios fuertes de los gnolls encontrando pistas, de estas pistas, puedo deducir que la fuente es demasiado poderosa y peligrosa como para que siga viva lo mejor era destruirla. seguimos buscando para encontrarla, con suerte apareció Alud. Un refuerzo mas ya que cada vez llegaban enemigos mas fuertes y hábiles.
*Se va a descansar, ya que los nervios lo tienen bastante mal*
Un día típico sin nada que hacer, viajando por la marca sin rumbo, a donde mis pies me llevaran.
Llegue a adbar interesado en las cervezas pero sin ganas de beber. decidí seguir viajando. A la salida me encontré con astinus, saludarlo como siempre y esperando su mala cara como es frecuente. Antes de despedirme apareció esa bruma roja y ambiente extraño. Cambiamos vistas buscando respuestas en la cara de ambos pero no entendíamos nada, acto seguido el cochero se fue muerto del miedo diciendo que era el día del cazador.
Erik llego con su falta de educación siempre presente pensando que el cambio de ambiente era obra miá ya casi a punto de usar su arma contra mi persona. Por un momento pensé que retendría defenderme, por suerte, el posible causante de los cambios o sus seguidores emitían ruidos de lejos de las montañas por lo cual decidimos ir en busca de la fuente.
Visitamos varios fuertes de los gnolls encontrando pistas, de estas pistas, puedo deducir que la fuente es demasiado poderosa y peligrosa como para que siga viva lo mejor era destruirla. seguimos buscando para encontrarla, con suerte apareció Alud. Un refuerzo mas ya que cada vez llegaban enemigos mas fuertes y hábiles.
*Se va a descansar, ya que los nervios lo tienen bastante mal*
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Sr_J
Volviendo de Sundabar, Virgi llego a lo que parecía el bosque de nevesmortas pero..... que le pasaba al bosque ??
Una extraña bruma se extendia a su alrededor, y de ella, aparecieron Erik, Grom, y muchos más luchando contra extrañas panteras y bestias.
- Por Moradin !!! *Virgi se unió a la lucha sin que le invitaran, por si acaso*
Acabaron con las bestias, aunque aparecieron más. Pero al poco llegaron a un claro del bosque. allí kirath, como poseído, esperaba algo.....
Pero al poco se levanto y comenzo a gritar Malar! Malar!!. *virgi lo miró extrañado, pero lo siguió*.
Acercandose a un gran arbol, empezó a rezar, y de la oscuridad apareció un extraño unicorni negro. Un aura lo envolvía, pero no Virgi no sabía que pensar.
El unicornio relinchó. Y por poco le dio un ataque. Temblaba y balbuceaba, pero no dejo las armas. Al poco se contuvo a su miedo, y avanzó al lado de su amigo Kirath a protegerlo de la extraña béstia.
Tras breves momentos de charla con el unicornio, Kirath lo maldijo, y le hizo desaparecer, maldiciéndolo.
Tras desaparecer el unicorni negro, y tras unos rezos a Silvanus, Kirath se desmayó. Pero todo volvio a la normalidad.
(Malar tienes nuevos enemigos en Nevesmortas)
Una extraña bruma se extendia a su alrededor, y de ella, aparecieron Erik, Grom, y muchos más luchando contra extrañas panteras y bestias.
- Por Moradin !!! *Virgi se unió a la lucha sin que le invitaran, por si acaso*
Acabaron con las bestias, aunque aparecieron más. Pero al poco llegaron a un claro del bosque. allí kirath, como poseído, esperaba algo.....
Pero al poco se levanto y comenzo a gritar Malar! Malar!!. *virgi lo miró extrañado, pero lo siguió*.
Acercandose a un gran arbol, empezó a rezar, y de la oscuridad apareció un extraño unicorni negro. Un aura lo envolvía, pero no Virgi no sabía que pensar.
El unicornio relinchó. Y por poco le dio un ataque. Temblaba y balbuceaba, pero no dejo las armas. Al poco se contuvo a su miedo, y avanzó al lado de su amigo Kirath a protegerlo de la extraña béstia.
Tras breves momentos de charla con el unicornio, Kirath lo maldijo, y le hizo desaparecer, maldiciéndolo.
Tras desaparecer el unicorni negro, y tras unos rezos a Silvanus, Kirath se desmayó. Pero todo volvio a la normalidad.
(Malar tienes nuevos enemigos en Nevesmortas)
Esta historia comienza en Adbar, un joven pelirrojo baja las escaleras empinadas de la gran ciudad corriendo ágilmente para alcanzar la caravana, totalmente en vano.
El muchacho se desplaza rápidamente hacia nevesmortas suspirando por la resignación de perder el último transporte cuando de repente divisa una especie de bruma roja a unas millas en el bosque.
La curiosidad puede más que el cansancio y se acerca a ver que esta pasando en la tundra helada internándose en la neblina sangrienta.
Solo tarda minutos en encontrar un suelo lleno de panteras negras, no eran panteras normales, sus rayas rojas sobre el pelaje las delatan, algo no andaba bien.
Se escucha un portazo, repara en que hay un fuerte cerca, ve caras conocidas, un bárbaro llamado Erik y al arcano Merlinius, y alguien mas a quien no logras reconocer.
Indagando se da cuenta que lo único que hizo fue ponerse en peligro en vano y encima, sin saber como, ahora eres carnada para atraer a un grupo de panteras que esta unos pasos al norte.
Parece que tus aliados son competentes en combate, acaban con las panteras con facilidad, aunque el trabajo de Alud no termina ahí, ahora pasa de carnada a batidor y tiene el deber de fijarse si el camino a tomar esta libre.
Grande es su sorpresa, gatos voladores devorando trasgos de la escarcha? esto esta peor de lo que pensaba, su grupo se adelanta, no da el tiempo para dar la orden, se desata la batalla.
Grande es el esfuerzo, y las ferocidad de las bestias no merma, una pantera ataca por la espalda y no llega a darse vuelta, la batalla termina para el.
Se despierta luego de unas horas, unos vendajes muy malos tratan de detener su hemorragia, Tymora estuvo a su lado una vez más. Poco tiempo después la bruma se dispersa y todo parece volver a la normalidad, no queda nada más que hacer que descansar.
//hago dos aclaraciones y perdón por el Offrol, Dae, Hitman007 y yo estamos contando una misma historia en 3 partes distintas, se lee en el orden que puse arriba, y segundo, pido perdón por los horrores de ortografía que debe haber, no tengo el Word en esta PC y no la puedo pasar, muy buen rol a todos! EDITO: la pase por word
El muchacho se desplaza rápidamente hacia nevesmortas suspirando por la resignación de perder el último transporte cuando de repente divisa una especie de bruma roja a unas millas en el bosque.
La curiosidad puede más que el cansancio y se acerca a ver que esta pasando en la tundra helada internándose en la neblina sangrienta.
Solo tarda minutos en encontrar un suelo lleno de panteras negras, no eran panteras normales, sus rayas rojas sobre el pelaje las delatan, algo no andaba bien.
Se escucha un portazo, repara en que hay un fuerte cerca, ve caras conocidas, un bárbaro llamado Erik y al arcano Merlinius, y alguien mas a quien no logras reconocer.
Indagando se da cuenta que lo único que hizo fue ponerse en peligro en vano y encima, sin saber como, ahora eres carnada para atraer a un grupo de panteras que esta unos pasos al norte.
Parece que tus aliados son competentes en combate, acaban con las panteras con facilidad, aunque el trabajo de Alud no termina ahí, ahora pasa de carnada a batidor y tiene el deber de fijarse si el camino a tomar esta libre.
Grande es su sorpresa, gatos voladores devorando trasgos de la escarcha? esto esta peor de lo que pensaba, su grupo se adelanta, no da el tiempo para dar la orden, se desata la batalla.
Grande es el esfuerzo, y las ferocidad de las bestias no merma, una pantera ataca por la espalda y no llega a darse vuelta, la batalla termina para el.
Se despierta luego de unas horas, unos vendajes muy malos tratan de detener su hemorragia, Tymora estuvo a su lado una vez más. Poco tiempo después la bruma se dispersa y todo parece volver a la normalidad, no queda nada más que hacer que descansar.
//hago dos aclaraciones y perdón por el Offrol, Dae, Hitman007 y yo estamos contando una misma historia en 3 partes distintas, se lee en el orden que puse arriba, y segundo, pido perdón por los horrores de ortografía que debe haber, no tengo el Word en esta PC y no la puedo pasar, muy buen rol a todos! EDITO: la pase por word
Última edición por seba172 el Vie Feb 06, 2009 5:03 am, editado 1 vez en total.
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Mattmos
*Cae un rayo cerca de Sheal, en el bosque de Nevesmortas*
- Sheal, tranquilo, es la tormenta... un poco fuerte, pero solo es una tormenta. Silvanus nos proteje bajo estas ramas... no temas... - Dijo Kirah no muy convencido de si mismo, por primera vez.
- ¡¡Wof, wof!!.
- Si... es muy fuerte... aunque no creo que dure mucho rato... las runas me hablaron sobre ellas y dijeron que no sería de lo que me preocuparía hoy. -
- ¿Wof?.
- Si, será lo mejor busquemos algún techo... vayamos al hospicio enano... que está cerca. -
-----
Tras una corta travesía, que se alargó considerablemente por el viento, Sheal y Kirath entran empapados en los barracones.
La tormenta cae implacable afuera, bajo techo pasan el rato hablando con un joven muchacho de aspecto sureño. Tras pasar las horas, el tiempo parece que mejora y Kirath se encamina a nevesmortas para ver si hay destrozos.
¡Que sorpresa la suya! Que cuando llega a la pequeña villa, todo el mundo está agitado y asustado... pero... no por la tormenta... sinó, por una extraña neblina rojiza y nauseabunda... como... a olor a sangre.
- ¡¿Por el gran Silvanus bendito, que demonios es eso?!
- ¡¡WOF!!
- ¿Panteras, pero... son...? mier... ¡¡ES LA BESTIA, SHEAL, ES LA BESTIA!!
Una marabunta de panteras se abalanzan sobre los indefensos ciudadanos de Nevesmortas. Salen de todas partes, de todas las entradas, en cantidades ingentes y ilimitadas... es una auténtica carnicería.
Cuerpos amontonados y siguen saliendo sin parar...
* Un estruendo en forma de rugido proveniente del bosque, estalla entre los gemidos y aullidos de los animales. Malar, ha vuelto. Y lo hace saber... y a que manera...*
------
Sin pensarlo dos veces. Kirath emprende la marcha hacia el bosque, junto a un numeroso grupo de aguerridos aventureros, o locos suicidas. Es una extraña amalgama de gentes del lugar... Arcanos, guardias de la ciudad, artesanos y algún que otro mercenario.
"Solo cuando arden los campos, los campesinos empuñan sus herramientas como armas", y es así.
Quizás nadie de ese grupo reparó nunca en Kirath, ni probablemente Kirath, nunca reparó en ellos... pero por el bien común las gentes luchan y
son capaces a morir junto a desconocidos por una redención superior.
-------
Ya en la linde del bosque. Todo el lugar, aparentaba una calma intranquila e inquietante. No se escuchaban los ruidos de los animales y la insidiosa neblina no hacía mas que condensarse cada vez mas... cada vez mas...
- ¡Mi amado bosque!.- Lleno de furia - ¡Robles Sagrados, Guardianes del Bosque. Despertad y moveos, el bosque os necesita!.-
*Y las ramas se movieron, con vida propia, las raíces salieron de la tierra para convertirse en pies. Y un Ent se despertó, para unirse a un grupo aterrorizado, pero lleno de valor al verlo.*
- ¡¡¡Es la Bestia, la presiento... veo su hambre insaciable, sus... sus... garras, sus horribles garras. Es la Bestia. Y no va a detenerse por nada. Debemos pararla nosotros, pues si no lo hacemos, nadie lo hará!!!
Luchando contra interminables hordas de animales enloquecidos por la rabia y el hambre sin fin, llegaron a un gran árbol rodeado por infames criaturas de horrible e ignominioso aspecto. Kirath, solo recordó cargar enloquecido contra ellas... y un destello y luego, oscuridad.
-----
- Despierta... despierta... despierta.- Dice la voz en la lejanía. - Despierta Kirath... tu viaje no termina aqui... debes terminar con lo que ha empezado... debes encontrarte con tu destino... DESPIERTA.- *bofetada*
*Kirath abre de golpe los ojos, para encontrarse de cara con dos barbudos enanos... reconoce a ambos...Grom, Virgi. ¿donde está... que... ha pasado?... La Bestia...*
Ayudado por los dos enanos, Kirath cojea hasta el árbol y se deja caer delante de él. Implora, llora y aparece quien tenía que aparecer... La Bestia...
-----
Incrédulo, Kirath ve a un unicornio negro delante suyo. (¿Un unicornio?). Pero, oliendo el engaño ve que poca cosa puede hacer contra la Bestia.
- ¡MALAR! -
- Así es... Kirath, soy la Bestia, soy Malar. -
- Bonito disfraz *cínico*. -
- ¿A que si...?, hasta te he engañado por unos momentos.-
- ¡Bestia Inmunda, marchaos de este lugar!.-
- ¿Así es como tratas a lo inevitable... a la otra parte de la misma balanza del equilibrio?, menuda decepción... -
- Largaos, ya habeis causado bastantes muertes, demasiadas.-
- No te engañes, sabes que sin mi, no hay vida, la vida necesita a la muerte, y esta necesita a la vida, solo soy la otra cara de la moneda. Además, no pienso irme... me gusta este lugar y pienso seguir cazando.-
- Entonces te perseguiré como tu lo haces, iré detrás tuyo, en vez de delante.-
- Entonces, nos volveremos a ver. Suerte en tu cacería. -
- Que haya una buena caza *cínico*. -
*Agotado, tras desaparecer Malar. Kirath se desploma ante el árbol, y murmura plegarias al Gran Roble. Mientras entra en un estado de ensoñación, la neblina se va disipando y Kirath cae inconsciente, agotado*
- Sheal, tranquilo, es la tormenta... un poco fuerte, pero solo es una tormenta. Silvanus nos proteje bajo estas ramas... no temas... - Dijo Kirah no muy convencido de si mismo, por primera vez.
- ¡¡Wof, wof!!.
- Si... es muy fuerte... aunque no creo que dure mucho rato... las runas me hablaron sobre ellas y dijeron que no sería de lo que me preocuparía hoy. -
- ¿Wof?.
- Si, será lo mejor busquemos algún techo... vayamos al hospicio enano... que está cerca. -
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Tras una corta travesía, que se alargó considerablemente por el viento, Sheal y Kirath entran empapados en los barracones.
La tormenta cae implacable afuera, bajo techo pasan el rato hablando con un joven muchacho de aspecto sureño. Tras pasar las horas, el tiempo parece que mejora y Kirath se encamina a nevesmortas para ver si hay destrozos.
¡Que sorpresa la suya! Que cuando llega a la pequeña villa, todo el mundo está agitado y asustado... pero... no por la tormenta... sinó, por una extraña neblina rojiza y nauseabunda... como... a olor a sangre.
- ¡¿Por el gran Silvanus bendito, que demonios es eso?!
- ¡¡WOF!!
- ¿Panteras, pero... son...? mier... ¡¡ES LA BESTIA, SHEAL, ES LA BESTIA!!
Una marabunta de panteras se abalanzan sobre los indefensos ciudadanos de Nevesmortas. Salen de todas partes, de todas las entradas, en cantidades ingentes y ilimitadas... es una auténtica carnicería.
Cuerpos amontonados y siguen saliendo sin parar...
* Un estruendo en forma de rugido proveniente del bosque, estalla entre los gemidos y aullidos de los animales. Malar, ha vuelto. Y lo hace saber... y a que manera...*
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Sin pensarlo dos veces. Kirath emprende la marcha hacia el bosque, junto a un numeroso grupo de aguerridos aventureros, o locos suicidas. Es una extraña amalgama de gentes del lugar... Arcanos, guardias de la ciudad, artesanos y algún que otro mercenario.
"Solo cuando arden los campos, los campesinos empuñan sus herramientas como armas", y es así.
Quizás nadie de ese grupo reparó nunca en Kirath, ni probablemente Kirath, nunca reparó en ellos... pero por el bien común las gentes luchan y
son capaces a morir junto a desconocidos por una redención superior.
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Ya en la linde del bosque. Todo el lugar, aparentaba una calma intranquila e inquietante. No se escuchaban los ruidos de los animales y la insidiosa neblina no hacía mas que condensarse cada vez mas... cada vez mas...
- ¡Mi amado bosque!.- Lleno de furia - ¡Robles Sagrados, Guardianes del Bosque. Despertad y moveos, el bosque os necesita!.-
*Y las ramas se movieron, con vida propia, las raíces salieron de la tierra para convertirse en pies. Y un Ent se despertó, para unirse a un grupo aterrorizado, pero lleno de valor al verlo.*
- ¡¡¡Es la Bestia, la presiento... veo su hambre insaciable, sus... sus... garras, sus horribles garras. Es la Bestia. Y no va a detenerse por nada. Debemos pararla nosotros, pues si no lo hacemos, nadie lo hará!!!
Luchando contra interminables hordas de animales enloquecidos por la rabia y el hambre sin fin, llegaron a un gran árbol rodeado por infames criaturas de horrible e ignominioso aspecto. Kirath, solo recordó cargar enloquecido contra ellas... y un destello y luego, oscuridad.
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- Despierta... despierta... despierta.- Dice la voz en la lejanía. - Despierta Kirath... tu viaje no termina aqui... debes terminar con lo que ha empezado... debes encontrarte con tu destino... DESPIERTA.- *bofetada*
*Kirath abre de golpe los ojos, para encontrarse de cara con dos barbudos enanos... reconoce a ambos...Grom, Virgi. ¿donde está... que... ha pasado?... La Bestia...*
Ayudado por los dos enanos, Kirath cojea hasta el árbol y se deja caer delante de él. Implora, llora y aparece quien tenía que aparecer... La Bestia...
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Incrédulo, Kirath ve a un unicornio negro delante suyo. (¿Un unicornio?). Pero, oliendo el engaño ve que poca cosa puede hacer contra la Bestia.
- ¡MALAR! -
- Así es... Kirath, soy la Bestia, soy Malar. -
- Bonito disfraz *cínico*. -
- ¿A que si...?, hasta te he engañado por unos momentos.-
- ¡Bestia Inmunda, marchaos de este lugar!.-
- ¿Así es como tratas a lo inevitable... a la otra parte de la misma balanza del equilibrio?, menuda decepción... -
- Largaos, ya habeis causado bastantes muertes, demasiadas.-
- No te engañes, sabes que sin mi, no hay vida, la vida necesita a la muerte, y esta necesita a la vida, solo soy la otra cara de la moneda. Además, no pienso irme... me gusta este lugar y pienso seguir cazando.-
- Entonces te perseguiré como tu lo haces, iré detrás tuyo, en vez de delante.-
- Entonces, nos volveremos a ver. Suerte en tu cacería. -
- Que haya una buena caza *cínico*. -
*Agotado, tras desaparecer Malar. Kirath se desploma ante el árbol, y murmura plegarias al Gran Roble. Mientras entra en un estado de ensoñación, la neblina se va disipando y Kirath cae inconsciente, agotado*
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Malar
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Al menos, eres consciente...seba172 escribió:
//hago dos aclaraciones y perdon por el offrol, Dae, Hitman007 y yo estamso contando una misma historia en 3 partes distitans, se lee en el orden que puse arriba, y segundo, pido perdon por los horrores de ortografia que deve haber, no tengo el word en esta pc y no la puedo pasar, muy buen rol a todos!
Seguid evitando cualquier off rol en los hilos on rol, por favor.
Este finde, las recompensas, quien postee después que me busque.
¡Buen rol! Habéis estado todos brillantes ^^
La Bestia (parda)
-
Damian
¡La ira de los dioses!
Tercer día del mes de Mirtul, 1418
¡La ira de los dioses!
La época del deshielo nos ha traído más desgracias. Esta vez, una gran tormenta arrasó Nevesmortas y las villas colindantes. Fueron arrancados árboles, derribados algunos hogares. Incluso los aldeanos lloraban por la extraña lluvia de rocas que caía del cielo. Todo ha pasado gracias a la actuación de los valerosos voluntarios que rescataron a los rezagados, llevándolos a la Atalaya. Cientos de animales invadieron La Marca, bestias de color pardusco con tonos rojizos. Algunos decían creer que eran manchas de sangre, incluso. Y las malas lenguas, que tardaban ya en pronunciarse, dejan un nombre como autor de la catástrofe: Malar.
¿Estamos ante una Cacería de proporciones divinas? ¿O acaso son los delirios de una Orden de Caballeros novicios y sin experiencia, cuya manera de engordar sus informes por una "mera" tormenta deja mucho que desear a la imaginación?
Lo cierto es que todo ha acabado ya y las tareas de reconstrucción han empezado por orden de su ilustrísima Lanzagélida. Que los vientos les sean propicios a vuesas mercedes, no muy fuertes, pero propicios.
¡La ira de los dioses!
La época del deshielo nos ha traído más desgracias. Esta vez, una gran tormenta arrasó Nevesmortas y las villas colindantes. Fueron arrancados árboles, derribados algunos hogares. Incluso los aldeanos lloraban por la extraña lluvia de rocas que caía del cielo. Todo ha pasado gracias a la actuación de los valerosos voluntarios que rescataron a los rezagados, llevándolos a la Atalaya. Cientos de animales invadieron La Marca, bestias de color pardusco con tonos rojizos. Algunos decían creer que eran manchas de sangre, incluso. Y las malas lenguas, que tardaban ya en pronunciarse, dejan un nombre como autor de la catástrofe: Malar.
¿Estamos ante una Cacería de proporciones divinas? ¿O acaso son los delirios de una Orden de Caballeros novicios y sin experiencia, cuya manera de engordar sus informes por una "mera" tormenta deja mucho que desear a la imaginación?
Lo cierto es que todo ha acabado ya y las tareas de reconstrucción han empezado por orden de su ilustrísima Lanzagélida. Que los vientos les sean propicios a vuesas mercedes, no muy fuertes, pero propicios.
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Ecnath
Despierto en la casa de la dama, dispuesto a comenzar mi viaje hacia Felbarr, salgo de alli para comenzar mi travesía, me encuentro la que la ciudad esta sumida en una neblina roja muy intensa, muy similar a la que vimos la noche anterior con Lady Oira y Alud, de camino a Argluna.
Me dirijo hacia el norte de la ciudad, donde la neblina todavía era visible, continuo adentrándome mas en ella, para terminar en la entrada al bosque, alli, había varios aventureros, algunos conocidos, otros no tanto.
Todos nos adentramos en el bosque, siguiendo a un druida cuyo nombre desconozco. Allí dentro, estaban los osgos de siempre, solo que esta vez estaban acompañados de unas panteras negras con manchas rojas sobre su pelaje, similares a las de la noche anterior, debería tratarse del mismo fenómeno que golpeo los caminos del norte.
Continuamos avanzando, hasta que en un momento , el druida comenzó a desvariar, tuvimos que detenernos, algunos comenzaron a hablarle, otros fuimos a asegurar el área, que por cierto estaba infestada de panteras y unas criaturas con alas un tanto extrañas, al menos para mi.
La lucha fue algo exhaustiva, pero gracias a la cooperación de todo el grupo, logramos aniquilar a esas criaturas sin pasar a mayores, cuando estábamos seguros de que nada se nos había escapado, volvimos con el grupo.
Para entonces, el druida había empeorado, comenzó a decir incoherencias, caminando hacia el árbol que reposa sobre la alta plataforma que da entrada a la cueva de los osgos, como si este estuviera llamándolo, no se que habrá hecho, pero recito unas palabras en una lengua que no entendía ni lo mas mínimo y al terminar, apareció un caballo extraño que parecía tener una rama clavada en su frente, muchos lo llamaron un unicornio, aunque el druida lo llamaba Malar, quizás así se diga unicornio en su dialecto, no lo se.
Este caballo comenzó a decir que estábamos avisados, que los caminos del bosque ya no eran seguros. Por dentro mío pensaba, “cuando lo han sido”, reste importancia a todo esto de los asuntos del bosque y me dirigí nuevamente a la ciudad para ver si podría ser de ayuda en algo.
//perdon por las faltas de orgografia que de seguro estaran por ahi, tambien pido disculpas por la demora.
Me dirijo hacia el norte de la ciudad, donde la neblina todavía era visible, continuo adentrándome mas en ella, para terminar en la entrada al bosque, alli, había varios aventureros, algunos conocidos, otros no tanto.
Todos nos adentramos en el bosque, siguiendo a un druida cuyo nombre desconozco. Allí dentro, estaban los osgos de siempre, solo que esta vez estaban acompañados de unas panteras negras con manchas rojas sobre su pelaje, similares a las de la noche anterior, debería tratarse del mismo fenómeno que golpeo los caminos del norte.
Continuamos avanzando, hasta que en un momento , el druida comenzó a desvariar, tuvimos que detenernos, algunos comenzaron a hablarle, otros fuimos a asegurar el área, que por cierto estaba infestada de panteras y unas criaturas con alas un tanto extrañas, al menos para mi.
La lucha fue algo exhaustiva, pero gracias a la cooperación de todo el grupo, logramos aniquilar a esas criaturas sin pasar a mayores, cuando estábamos seguros de que nada se nos había escapado, volvimos con el grupo.
Para entonces, el druida había empeorado, comenzó a decir incoherencias, caminando hacia el árbol que reposa sobre la alta plataforma que da entrada a la cueva de los osgos, como si este estuviera llamándolo, no se que habrá hecho, pero recito unas palabras en una lengua que no entendía ni lo mas mínimo y al terminar, apareció un caballo extraño que parecía tener una rama clavada en su frente, muchos lo llamaron un unicornio, aunque el druida lo llamaba Malar, quizás así se diga unicornio en su dialecto, no lo se.
Este caballo comenzó a decir que estábamos avisados, que los caminos del bosque ya no eran seguros. Por dentro mío pensaba, “cuando lo han sido”, reste importancia a todo esto de los asuntos del bosque y me dirigí nuevamente a la ciudad para ver si podría ser de ayuda en algo.
//perdon por las faltas de orgografia que de seguro estaran por ahi, tambien pido disculpas por la demora.
