Las consecuencias de las artes Arcanas

[DuKKoN]

Os traigo la historia de la que, quiza algun dia, sea una importante y sabia maga, aunque aun es joven para serlo, demosle algo de tiempo....

Ariakna vivia en una arboleda a pocas millas de suzail, capital de cormyr (para los que no sepan donde esta, les dire que yo aun no he encontrado agencia de viajes que tenga suzail como destino...). Es una elfa como las demas; caprichosa, un tanto altiva, guapa (bajaros el hak "kamosha head" del vault pa verle la cabeza, jodios!!), le gusta la gente, la pesca, el tiro con arco...Nunca le gustaron demasiado las espadas, ni la violencia, detesta las injusticias...

Pero lejos de todo esto, tambien tenia un sueño. Le atraia el mundo de lo arcano, hasta tal punto que....Esperad, aun es pronto, dejadme contaros algo mas sobre ella.

Como imaginareis en una arboleda de elfos es facil encontrar varos exploradores, cazadores, algun druida, hasta creo que habia un bardo. Pero lo que no habia era algun mago que enseñase a Ariakna ese mundo que tanto le atraia. Aunque esto no era ningun impedimento para ella.

Esta joven elfa tenia una vida tranquila y divertida; por las mañanas recogia algunas frutas mientras su padre salia de caza, y era de los mejores de la arboleda (No creo que lo sepais pero era su padre el que hacia las guardias de noche en la arboleda, ya que era el mas diestro con el arco de todos los elfos de alli). Tras la comida casi siempre pasaban la tarde practicando el tiro con arco contra dianas improvisadas y colgadas de algunas ramas. Y cuando no, se iva al centro de la arboleda, donde casi siempre tenia lugar alguna fiesta o celebracion.

Pero las noches no os imaginareis como las pasaba... Ya dije que le gustaba pescar, no? pero ningun rio habia en la arboleda, solo arboles. Aunque ella conocia mejor que nadie los pequeños fallos de su padre, que al fin y al cabo, era quien hacia guardia en el turno de noche. Asi que todas las noches se las ingeniaba para escapar de su padre y de la arboleda para ir a pescar a las afueras del bosque por donde pasaba un riachuelo. Siempre tubo la suerte de no cruzarse con ningun lobo (o algo peor) aunque dicen que la buena suerte se termina acabando....

Estas escapadas de Ariakna a pescar por la noche tenian doble intencion. Le gustaba pescar, pero lo que mas le gustaba era que una vez a la semana pasaba un mercader al cual le vendia su pescado a cambio de que la llevase a Suzail. El mercader iva a la capital de Cormyr a por telas, comida, cerveza del lugar, y volvia a su aldea para venderlas, y cada semana otro viaje mas. Todas las semanas Ariakna vendia el pescado a este mercader a cambio de que la llevase con el y la trajese cuando el volviese. Asi podia ir a la biblioteca de Suzail un par de horas cada siete dias. Para ella era suficiente...

Temo deciros que os anteriormente os oculte parte de verdad: Por las mañanas, en la arboleda, cuando el padre de Ari salia de caza, ella no se limitaba a recoger fruta. Tambien estudiaba y practicaba lo que le dio tiempo a anotar y lo que recordaba de cuando estaba en la biblioteca de Suzail. Poco a poco fue aprendiendo cosas basicas, como crear luz, o conjurar frio... Su suerte, su destino, y su vida al completo cambiaron cuando quiso abarcar demasiado. Trató de traer una criatura... Realmente no tenia claro que hacia, en parte insensatez, aunque consiguio crear un vinculo con un cuervo anciano. Desde aquella mañana con solo un gesto aparece un astuto y fiel halcon que la acompaña sin dudar, pero este no fue el unico cambio....

En el momento de acabar el conjuro (o comenzar el accidente, segun se mire) todo comenzo a volverse difuso, a perder color, las formas de las cosas empezaron a ser abstractas. Ariakna misma comenzo a notar que no era material, que se habia convertido en estado gaseoso y transparente, como si fuera un ente sin cuerpo en aquel mundo que se volvia surrealista (como el que se come un tripi, ok?). Todo iva a peor hasta que Ari no pudo mas y perdio el conocimiento.

Ni ella misma sabe cuanto tiempo paso, ni como paso el tiempo, pero cuando Olir le picoteo la cabeza, Ari se desperto gritando <Quieres dejar de hacer eso en MI cabeza, Olir?>

Delante de ella habia un halcon al parecer algo viejo. Nunca le habia visto, de echo era el primer halcon que veia. Sin embargo sabia que era un halcon, que era anciano, y que se llamaba Olir. Algo en su cabeza tenia relacion con ese animal, el cual tambien parecia mostrarse como si conociese a Ari.

<Perdona los picotazos Srta Ari, pero la estube llamando y no conseguia despertarla> Fueron las palabras de Olir, cuando Ariakna logro ponerse en pie. Se acababa de dar cuenta de que estaba en campo desconocido, con un halcon al que no habia visto, pero conocia y encima hablaba. O al menos ella entendia lo que el decia.

Estubieron conversando un rato, Olir tampoco comprendia mucho mas que ariakna, pero es muy anciano, creedme, y tiene mas experiencia sobre la vida, y conoce a algunos magos en el plano de donde proviene. Entre los dos llegaron a varias conclusiones. Primero que los ambos estaban muy lejos de sus respectivas tierras, la segunda, que solo Ari estaba destinada a buscar su arboleda por sus propios medios. Ya que con respecto a Olir, podia volver a su plano o regresar con Ariakna, instataneamente, siempre que esa fuese la decision de ella. Y esa era la tercera conclusion, que tras el accidente (o conjuro) las vidas de Olir y Ariakna estan ligadas, en cierto modo...

Cerca habia una muralla, tal vez de una villa o ciudadela. Decidieron acercarse y vieron junto a una puerta enorme, dos guardias con grandes y pesadas armaduras de metal. <Buenos dias, estan abiertas las puertas de la villa?> Le pregunto Ariakna a uno de los guardias, el cual no le hizo ni caso... al ver tal comportamiente su compañero, el otro guardia, se apresuro en decir <Bienvenida a la ciudad de Nevesmortes, guarde su arco antes de entrar, y no cause alboroto en la ciudad>