− | No comencé la aventura de NWN multijugador enseguida de que saliera el juego. Primero me pasé el modo de un solo jugador hasta 3 veces. Cuando coincidí con unos amigos que querían jugar, comenzamos realmente a rascar el concepto de "rolear". Era el año 2005. Probamos muchos servidores: Reino de Aldor, El Orbe, Neverun, Puerta de Baldur y otros de los que ni siquiera me acuerdo. Hasta que aterrizamos en el Reino de Cormyr (el de Nach), donde nos quedamos una buena temporada. Allí roleé guerreros, exploradores, bárbaros y paladines, siendo éstos mis pjs favoritos. Se cerró el servidor, hubo otro posteriormente pero no tuvo tanto éxito. Y entonces es cuando fui a parar a la Marca Argéntea en 2006, y ya quedé enamorado de sus frías estepas, su ardiente y peligroso desierto, sus tupidos bosques y su inigualable mundo paralelo: La Infraoscuridad. Y aquí realmente es donde aprendí realmente a rolear de verdad. Y aquí me quedé, hasta el día de hoy. | + | No comencé la aventura de NWN multijugador enseguida de que saliera el juego. Primero me pasé el modo de un solo jugador hasta 3 veces. Cuando coincidí con unos amigos que querían jugar, comenzamos realmente a rascar el concepto de "rolear". Era el año 2005. Probamos muchos servidores: Reino de Aldor, El Orbe, Neverun, Puerta de Baldur y otros de los que ni siquiera me acuerdo. Hasta que aterrizamos en el Reino de Cormyr (el de Nach), donde nos quedamos una buena temporada. Allí roleé guerreros, exploradores, bárbaros y paladines, siendo éstos mis pjs favoritos. Se cerró el servidor, hubo otro posteriormente pero no tuvo tanto éxito. Y entonces es cuando fui a parar a la Marca Argéntea en 2006, y ya quedé enamorado de sus frías estepas, su ardiente y peligroso desierto, sus tupidos bosques y su inigualable mundo paralelo: La Infraoscuridad. Y aquí es donde aprendí realmente a rolear de verdad. Y aquí me quedé, hasta el día de hoy, aún enamorado del mismo servidor. |