Historia de Diva

[Yayimg]

Era de una joven su pasado perdido
Era de una chica su corazón herido

La luna estaba alta y sombría
En cuarto estrecho
La bella joven sus ojos abría
Y solo vio el techo

Entonces el cielo engrandecido atronó
Ella perdida y sin memoria se encontró



Lentamente ella, atemorizada, no sabia en que cuarto estaba, no tenia recuerdos, no tenia nada. Se miraba al espejo sin conocerse, como si nunca hubiera visto ese cuerpo femenino tan joven y bello. Todo era extraño, nada tenía sentido.

Entonces pasaron los días, pasaron crueles como solo el tiempo sabe ser. La joven descubrió de sus captores que era rehén de una deuda. Una desorbitada deuda que ni trabajando trescientos años pagaría con sus danzas y su arte, un arte que realizaba sin saber donde o como había aprendido.

No solo el conocimiento del baile era lo que poseía. Sabia de música y de toda clase de instrumentos, sabía sobre la historia y sobre rumores de más de cien años. Estos datos venían a ella sin pedirlo, simplemente estaban latentes esperando a salir en la menor provocación.

Asi pues llego un día que ella no esperaba, resulto liberada, aunque solo fue una ilusoria libertad. Pues el noble que pago su deuda encandilado por su presencia, la retuvo después y entrego la joven a la deidad que en secreto seguía, y Loviatar era cruel con toda joven inocente.

El tiempo pasó, los días fueron largos y tortuosos. Y aunque no era cierto que los días durasen más de 24 horas, si era muy cierto que las torturas se repetían y fueron de tal calibre, que no se narraran ni aquí ni ahora.

Pero un día de luz llego, alguien o algo a la joven presa de Loviatar libero y ella escapo, con ganas, con desesperación, y a pesar de lo sufrido, con ilusión y con inocencia. Pues la inocencia y la sonrisa era lo único que la hace no pensar en lo sufrido.

Tuvo muchas vivencias, tuvo no pocos perseguidores, pero la joven logro aprender y huir en el exterior. Descubrió tener muchos conocimientos, pero solo accedía a ellos de manera breve y sin esperárselo. Cuando un conocimiento de historia o algún saber quizás oculto podían salvarla de ser atrapada, venia a ella, y ella hacia lo posible por darle uso, era su única alternativa a ser apresada.

En su camino hasta que llego desde Amn a la lejana Marca Argentea paso casi un año, pasaron muchas historias y muchos desenlaces, ella vivió como pudo, haciendo lo necesario, y descubrió una cosa. La vida era bella y alegre, pues después de lo sufrido, una vida normal y sin dolor era algo que podía apreciar y amar mejor que nadie, y como era gracias a su arte por lo que podía vivir. Vive por y para el arte, lo ama y lo persigue.




¿Cómo te llamas jovencita?
No lo se… pero una vez me pusieron un nombre que me gustaba.
¿Cuál?
Llámame, Diva.

[angel_caido]

Siempre me sorprendes con tus historias tan bien relatas, con ese estilo no te cansas de leer.