Azzanir Ertas (Trasfondo)

[tato17]

Corría el año 1337 cuando Elindrae dio a luz a Azzanir y a su hermano mellizo Abildae en la ciudad sureña de Calimport. Lamentablemente Elindrae murió en el parto y Atandir, padre de los hermanos, no pudo evitar odiarlos y culparlos. Así fue como, aun cuando eran unos niños, Atandir vendió a sus dos hijos como esclavos a un Pachá (lider de cofradía de ladrones) de gran renombre en la ciudad.
Durante su adolescencia y primeros años de madurez Azzanir y Abildae fueron compañeros fieles y se ayudaban mutuamente, hasta que alcanzaron un rango importante dentro de la cofradía y Abildae comenzó a rivalizar con Azzanir, quién no pretendía ninguna competencia, pero que era el favorito del Pachá.
Una cálida noche de verano, iluminada por la luna llena y un enjambre de estrellas parpadeantes, los hermanos se encontraban en un mugroso callejón de la ciudad, esperando por un comerciante para ajustar cuentas. Pero Abildae, acosado por la maldad sufrida a lo largo de su vida, y principalmente dentro de la cofradía, intentó acabar con la vida de Azzanir quien en un acto reflejo dejó a Abildae malherido.
Viendo lo que había hecho a su hermano, su única familia, Azzanir corrió desesperado en la noche, corrió sin mirar atrás, esperando jamás tener que regresar a la maldita ciudad de Calimport, corrió fuera de las puertas de la ciduad, por los cambiantes caminos del desierto, corrió durante todo el día siguiente a la atroz noche. Corrió y siguió corriendo, hasta que calló y sintió paz, sintió que la oscuridad de la muerte se cernía sobre él y que por fin podría olvidar todo lo ocurrido.
Pero la suerte nunca jugo a favor de Azzanir, y una semana más tarde despertó en el monasterio secreto de La Perla del Desierto, que según las leyendas, el monasterio se movía junto con las dunas, y nunca estaba en el mismo lugar.
Los monjes de La Perla vieron en Azzanir un gran potencial espiritual, una resistencia esencial a la maldad que había rodeado su vida desde el momento en que nació y decidieron entrenarlo como a uno de ellos.
Tras un largo año de entrenamientos y meditación, Azzanir estaba listo para volver a confiar en la vida. Pero durante ese año, la cofradía de la que él había escapado, a la que su hermano todavía servía, había hecho todo lo posible por encontrarlo, y así fue. Una noche los asesinos de la cofradía llegaron al templo y asesinaron a todos los monjes, Azzanir logró escapar con vida pero tuvo que huir de Calimshan, huir tan al norte como le fuera posible, porque si alguna vez volvía a ver a su hermano, tendría que matarlo.

[--Talos--]

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